El alcalde de Córdoba, Juan Martínez Flores, negó que haya sido amenazado por la delincuencia organizada o que haya tenido necesidad de incrementar su seguridad a raíz de ello.
Esto a pesar de que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez aseguró que alcaldes de la zona centro de la entidad han sido amenazados por grupos delincuenciales.
“Nunca he sido amenazado, camino con personas que me acompañan, no traigo escoltas, solo la secretaria particular y quien conduce la unidad. Yo camino desde mi casa”.
Aseguró que tiene la conciencia tranquila y que ni él ni su personal portan armas. Incluso dijo que cuando algo (contra los alcaldes ocurre) es porque el destino ya lo tenía planeado.
“No porto armas, tenemos la conciencia tranquila que esa es la fortuna y lo que va a pasar sucede porque el destino ya lo tenía planeado, pero sabemos la posición que guardamos y preferimos llevar la fiesta en paz con todos para que no haya algún detalle que detone”.
Sobre las observaciones realizadas a la cuenta pública 2021 por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), dijo que su municipio tiene que aclarar 127 millones de pesos.
Aseguró que su administración entregará la información en tiempo y forma a fin de aclarar las observaciones hechas por la Auditoría.
