El Pico de Orizaba es uno de los escenarios más importantes en la zona centro – sur del país, siendo la cumbre más alta de México y la tercera de Latinoamérica.

El volcán es el segundo más alto de Norteamérica, ya que cuenta con una altitud de 5 mil 636 metros, del cual se tienen diversas historias y leyendas.

La formación se encuentra en el límite de Veracruz y Puebla; además de que es un hermoso paisaje natural; y aquí te presentamos cinco datos que probablemente no conocías.

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5 datos curiosos del Pico de Orizaba

Significado de su nombre

El volcán también es conocido como Citlaltépetl, que es un nombre en náhuatl, el cual se divide en ‘citlalli’: estrella; ‘tépetl’: monte; de esta manera su nombre significa ‘Monte de la estrella’, es decir, Cerro de la Estrella.

Dejó de formar parte de Veracruz

El Registro de Nombres Geográficos Continentales, Insulares y de las formas del Relieve señala que ya no es parte de Veracruz, sino que sólo es parte de Puebla. Lo anterior debido a que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) realizó una recategorización.

Última erupción 

Fue en 1846 cuando ocurrió la última erupción del volcán, que tiene un cráter de 500 metros de ancho y 300 de profundidad. Actualmente se considera que está inactivo, pero en su historial figuran 23 erupciones confirmadas y dos de carácter incierto.

¿Cuál es la mejor época de año para visitarlo?

Si tienes ganas de visitarlo, son diferentes momentos del año los ideales para acudir; durante la llamada ‘temporada de secas’, que es entre octubre y mayo, los mejores para practicar montañismo. Por otra parte, abril es el mejor para quienes quieren escalar el volcán, porque no hace tanto frío.

Glaciares del volcán 

El Citlaltépetl contaba con 14 glaciares hasta hace unas décadas, pero alrededor de 1940 comenzaron a derretirse y los últimos años se perdieron cuatro de los cinco que aún tenía.

Un dato adicional es que al Pico de Orizaba lo envuelven diferentes leyendas que explican su origen, una de estas es que el dios azteca Quetzalcóatl subió un día al volcán para iniciar su camino hacia la eternidad. Una vez en el centro, el fuego devoró su cuerpo mortal, pero su alma se transformó en un quetzal que voló hasta verse desde abajo como una brillante estrella.

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