La zona centro de Veracruz registró hoy su segundo día violento, luego de que autoridades ministeriales hallaron un hombre decapitado, con visibles huellas de tortura y encobijado en el municipio de Yanga.
El hallazgo fue registrado por vecinos en el camino de terracería de la comunidad de la Concepción, lugar donde también detectaron un mensaje violento en una cartulina, ubicada al lado de la cabeza humana.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno de Veracruz (SSP), de la Marina y de la Ministerial, acordonaron la zona y activaron un operativo para la localización de los presuntos responsables.
El cadáver, que estaba tirado a unos metros del puente de La Virgen a unos metros de otra comunidad llamada Potrero, fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) del ejido San Miguelito en Córdoba, Veracruz.
Tras este hecho, que se suma a la oleada de violencia registrada en las últimas 48 horas en la zona centro, la Fiscal General del Estado, Verónica Hernández Giadáns, garantizó que no habrá impunidad.
Luego de reunirse con el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Alfonso Reyes Garcés, la Fiscal soslayó los cuestionamientos de los periodistas y solo se limitó a explicar que revisaron las carpetas de investigación de cada uno de los asesinatos perpetrados ayer y hoy en municipios de la zona centro.
Ayer miércoles, en una nueva oleada sangrienta en aquella zona central de Veracruz, en menos de seis horas se registraron siete asesinatos que sumaron 11 con cuatro heridos en las últimas 24 horas.
Los hechos de violencia se suscitaron en la zona de las Altas Montañas, en los municipios de Río Blanco, Rafael Delgado e Ixtaczoquitlán, donde varias balaceras atemorizaron a sus habitantes.









