- Nahle admite rezagos y promete abrir plataforma estatal tras cuestionamientos en conferencia
Xalapa, Ver. – Veracruz se encuentra entre las entidades con peor desempeño en transparencia anticorrupción a nivel nacional, al registrar apenas 1% de cumplimiento en la Plataforma Nacional del Sistema Anticorrupción (PNSA), sin que ninguna dependencia estatal o municipal aparezca reportando información completa, de acuerdo con datos exhibidos durante la conferencia de prensa de la gobernadora Rocío Nahle.
El señalamiento expuso una grave omisión institucional: la falta de carga de declaraciones patrimoniales, de intereses, sanciones e inhabilitaciones, información clave para prevenir actos de corrupción y detectar antecedentes de servidores públicos antes de su contratación.
La plataforma nacional, administrada por instancias federales, permite precisamente ese cruce de datos; sin embargo, en el caso de Veracruz, la información simplemente no aparece.
Gobierno de Veracruz opera una plataforma propia, fuera del sistema nacional
Ante el cuestionamiento, la gobernadora reconoció que Veracruz no reporta directamente a la plataforma nacional, ya que el estado utiliza un sistema local de declaraciones, lo que en la práctica ha generado opacidad y desconexión con el mecanismo federal.
“Veracruz tiene su propia plataforma… todos reportan a través de la plataforma del estado”, explicó Nahle, quien admitió que la plataforma estatal no es visible públicamente, al menos para consulta ciudadana y periodística.
La mandataria aseguró que instruirá al Órgano Interno de Control para que dicha plataforma sea habilitada, aunque no precisó plazos ni responsables, ni aclaró por qué no se ha garantizado antes el acceso público a información que por ley debe ser transparente.
Ciudadanía sin resultados tras años de escándalos por desvíos
El cuestionamiento también puso sobre la mesa la expectativa social incumplida, después de sexenios marcados por señalamientos de desvíos multimillonarios, el Sistema Anticorrupción de Veracruz no muestra resultados visibles ni información verificable en los canales nacionales.
Aunque Nahle afirmó que el sistema “sí está funcionando”, reconoció que su administración se ha concentrado en “ordenar” un gobierno con múltiples pendientes, lo que implícitamente confirma que la agenda anticorrupción no ha sido prioritaria en términos de resultados públicos.
“Evaluación sí hay… debe ser público para que ustedes tengan reportes”, sostuvo, sin que hasta ahora existan dichos reportes accesibles.
Transparencia parcial y rendición de cuentas en duda
Especialistas advierten que operar plataformas estatales aisladas, sin interoperabilidad ni visibilidad nacional, debilita el combate a la corrupción y abre la puerta a discrecionalidad, justo lo que el Sistema Nacional Anticorrupción buscaba erradicar.
El caso de Veracruz deja una pregunta abierta: ¿cómo evaluar el combate a la corrupción si la información no es pública ni comparable a nivel nacional?
