El pasado 1 de agosto, la caída sobre la carretera de un ataúd, que era transportado con un cuerpo dentro, causó conmoción e incluso imágenes del hecho se viralizaron en redes sociales debido a las anormalidad de las escenas.
En Senillosa, una localidad argentina situada en la provincia de Neuquén, se pudieron ver momentos muy poco comunes, esto después de que a una camioneta fúnebre se le abriera la puerta trasera y dejara caer el ataúd donde era transportado un cuerpo, mismo que quedó fuera del féretro a la vista de los transeúntes y conductores que pasaban por la llamada Ruta 22.
El traslado del cuerpo estaba a cargo de la Cooperativa de Servicios Públicos de Plottier, la cual explicó que el desafortunado suceso se debió a las malas condiciones de la avenida donde se circulaba y que iba en dirección a Picún Leufú.
“Fue un accidente. Dado al estado del camino y una zanja, el propio ataúd provocó que se desprendiera y el peso hizo que se abriera la puerta neumática de la ambulancia”, detalló la empresa.
La cooperativa agregó que en los años que llevan ofreciendo su servicio no les había pasado algo igual, razón por la cual las personas encargadas del traslado, así como el presidente y trabajadores de la empresa “estamos dolidos por lo que sucedió”.
El cuerpo que cayó al asfalto producto de la caída del ataúd era de una joven de nombre Claribel Flores, de 21 años, quien falleció por complicaciones provocadas por el COVID-19.
