En México, más de 50% de los hogares tienen al menos un perro o un gato, y se calcula que en todo el país hay alrededor de 23 millones de perros y 6 millones de gatos, de los cuales, 10% terminan en situación de calle.

Casi 70% de los perros que llegan a una casa, llegan de manera no consensuada, es decir, no lo platican todos los miembros de la familia; generalmente es un regalo”, explicó Román Delgado, gerente de Asuntos Públicos para Mars Petcare México, empresa que realizó ese cálculo debido a que no existe una cifra oficial precisa.

“Esto provoca que muchos de los cachorros no lleguen a cumplir siquiera el año y medio cuando ya los echaron a la calle”.

¿Por qué terminan en la calle?

El hecho de que muchas personas no estén conscientes de la responsabilidad que implica tener un animal de compañía en casa, así como la falta de información sobre la especie, provocan que cada año miles de animales terminen abandonados en la calle, advirtió Delgado.

Cuando el cachorrito es muy pequeño, es juguetón y muy simpático, así que todo va muy bien hasta que empieza a crecer y, descubriendo el mundo, tiene comportamientos que son naturales de su especie, como morder, babear, aprender a ir al baño o a rascar, por lo que llegan a hacer cosas como destruir objetos de la casa pensando que son juguetes, y es entonces cuando, como no se tiene un adecuado entrenamiento para el perro o el gato, lo más sencillo es echarlos a la calle”, afirmó.

Aunque cada vez hay más conciencia sobre la responsabilidad de tener una mascota, opinó, el problema de los perros y gatos en situación de calle persiste en México.

“Ha habido un avance. Antes, para adquirir un perro la gente siempre quería uno de raza, era lo cool, y nadie tenía en la mente adoptar; pero ahora ya es ‘mejor visto’ adoptar un perro y que incluso no sea de raza”, admitió. “Todos los perros sean de raza o no, merecen una segunda oportunidad si están en situación de calle”.

El problema de los perros en situación de calle genera afectaciones como contaminación por orina y heces fecales, además de ataques y agresiones, subrayó. “Son perros que se vuelven muy territoriales por la falta de socialización con los humanos”.

Tres puntos para resolver el problema

Delgado dice que, para disminuir el número de perros en situación de calle en el país son necesarias tres cosas: “La primera es la adopción, para poder rescatara a los que ya están ahí”, apuntó.

La segunda es la esterilización de perros para prevenir que ya no nazcan más de estos animales que estén en situación de calle”, agregó.

Con campañas a nivel nacional, esta compañía ha realizado más de 400 esterilizaciones desde 2008, con lo cual previnieron una descendencia de más de 900 millones de perros y gatos que hubieran nacido en la calle, reveló.

“El tercer punto es la educación, es decir, dar a la gente información adecuada para que comprendan la problemática y se animen a ayudar”, mencionó.

Más adopciones

Desde hace 10 años, esta empresa trabaja, a través de un programa llamado “Pedigree Adóptame”, con una red de 13 albergues a nivel nacional y 13 asociaciones de asistencia, como Mascoterapia Perros de Servicio AC en Querétaro, la Cruz Roja de Guanajuato y la brigada de Perros de Búsqueda y Rescate de la UNAM.

Asimismo, trabajan de la mano con instituciones como la Facultad de Medicina Veterinaria, también de la UNAM, en temas de bienestar animal con el fin de generar una conciencia a través de la adopción.

Queremos que cada vez más gente se interese para apoyar a un perro en situación de calle y así pueda llegar a un hogar amoroso”, aseguró Delgado.

A los perros que se rescatan en estos albergues –a los cuales la empresa apoya con todo el alimento necesario, lo que representa un 70% del gasto de ese tipo de instituciones–, es necesario brindarles un servicio de rehabilitación antes de ofrecerlos en adopción.

“Hay que rehabilitarlos para que ya no se comporten como cuando vivieron en la calle, y además hay que atenderlos de manera física, con nutrición adecuada, atención y cuidados especiales porque en muchas ocasiones el perro llega en condiciones deplorables debido a que come lo que se encuentra, generalmente basura o restos de comida”, apuntó el representante de este programa que en 10 años ha logrado más de 45,000 adopciones en México.

Los beneficios de ser un dueño responsable

Delgado afirmó que tener un perro en casa tiene muchos beneficios para las personas.

“Un perro ayuda en la salud física y emocional, en el estado de ánimo, en el sistema inmunológico y además ayuda mucho socialmente”, reiteró.

Aunque a lo largo del país ya no es tan común –como lo era en otros años– ver a un perro encerrado en una bodega “para que la cuide” o en lugares poco seguros, como las azoteas, todavía hace falta generar más conciencia.

La gente debe ser más consciente de no tener un perro si no puede. No se trata de tenerlo porque sí, sino que debe ser un compromiso de todos los miembros de la familia y que entiendan que tienen necesidades diferentes a las nuestras”, dijo.

Cuando se adopta un perro, es necesario pensar en su nutrición, en que hay que llevarlo periódicamente a revisión con el médico veterinario, procurar que haga ejercicio y brindarle cariño y respeto, concluyo Delgado.

Publicidad