Las imágenes de un accidente marino que pudo haber terminado en tragedia, han sido difundidas en Internet causando sensación entre millones de personas que las han visto alrededor del mundo.
Se trata de la escena en que el buzo sudafricano Rainer Schimpf fue tragado por un enorme cetáceo de 15 metros de largo y 25 toneladas de peso.
El angustiante acontecimiento se dio en Port Elizabeth, al sur de Sudáfrica mientras el experimentado buzo que lleva más de 20 años sumergiéndose en las profundidades acuáticas, filmaba un cardumen de sardinas.
“Había empezado a filmar delfines, tiburones, alcatraces, pinguinos y cormoranes que se alimentaban de sardinas cuando, llegando desde el fondo, un rorcual de Bryde surge súbitamente”, contó el también activista defensor del medio ambiente.
El incidente fue presenciado por la esposa del buzo, Silke, y un fotógrafo que documentaron lo que sucedió en los horribles segundos que Schimpf pasó en la boca del impresionante animal.
“Sentí presión alrededor de mi cintura, y supe inmediatamente lo que estaba pasando”, agregó. “Sólo fueron unos segundos, hasta que el rorcual se dio cuenta de su error y abrió la boca para escupirme”.
El cetáceo es un rorcual, un espécimen raro y difícil de fotografiar, que se alimenta de pequeños peces y crustáceos, razón por la que probablemente el buzo salvó su vida, pues al sentir un objeto extraño dentro de su boca, simplemente lo escupió.
La experiencia de Schimpf le permitió no sentirse intimidado por el incidente y unos minutos después, al comprobar que no tenía ninguna herida, volvió a lo suyo dentro del agua.
