Una familia de osos negros fue captada la semana pasada robando unas donas (donuts) de una furgoneta de reparto de la cadena Krispy Kreme en Alaska, según informaron los medios locales. 

El repartidor de la compañía dejó brevemente su furgoneta desatendida y abierta mientras entregaba un pedido en una tienda exprés de la Base militar de Elmendorf-Richardson, en Anchorage. El hombre no se dio cuenta de que allí se reunían con frecuencia una osa negra y sus cachorros.

El empleado dijo que podía oír a los osos rompiendo los paquetes de donas y, a pesar de los esfuerzos para disuadirlos golpeando la furgoneta, los animales continuaron con su festín. El trabajador decidió llamar a la seguridad de la base, cuyos efectivos hicieron salir a los osos haciendo sonar las sirenas en las inmediaciones.

Al final, la madre y el osezno se comieron cerca de 26 paquetes de donas.

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