El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) ha ofrecido un lote de robots cuadrúpedos similares a un perro, conocidos oficialmente cono Vehículos Automatizados de Vigilancia Terrestre, a las patrullas fronterizas del país para que sean usados en el control de su extensa frontera con México.
El programa apunta a “incrementar la tecnología y multiplicar la fuerza” de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza en el área limítrofe, así como “reducir la exposición humana a peligros que amenazan la vida”, precisaron desde la DHS en un comunicado publicado este martes, destacando la alta efectividad de los robots en terreno duro.
“La frontera sureña puede ser un lugar inhóspito para el hombre y el animal y es por eso que una máquina puede sobresalir allí”, añade el documento.
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En el 2020, las FF.AA. estadounidenses ya recurrieron a los perros robóticos del mismo fabricante, Ghost Robotics, para patrullar bases militares. Mientras que la compañía, a su vez, colaboró con el fabricante de armas de fuego SWORD International para crear versiones armadas con rifles letales capaces de dar en el blanco a más de 1,200 metros de distancia.
Se detalla que los modelos desprovistos de armas ya han sido testeados en “tareas de centinela” en las que patrullaron de manera autónoma perímetros preestablecidos, equipados con cámaras y distintos sensores.
Las pruebas incluyeron inspecciones de material rodante ferroviario y edificios residenciales e incluso “un escenario que simuló encontrarse con individuos potencialmente hostiles”.
Los autómatas cuadrúpedos, de unos 45 kilos de peso, tienen capacidad para llevar diversos tipos de cámaras —entre ellas térmicas y de visión nocturna—, así como sensores químicos, biológicos, radiológicos y nucleares.
De acuerdo con el comunicado, pueden ser controlados por radio, wi-fi, GPS y “otros medios”, lo cual plantea la preocupación sobre qué tan bien están protegidos contra un potencial secuestro remoto por parte de ‘hackers’.