La demanda de lugares para vivir con mascotas crece cada vez más, sobre todo en grandes ciudades como la capital de la república de Monterrey, lo que ha hecho que las empresas constructoras e inmobiliarias busquen adaptar sus proyectos futuros a esta necesidad.
Los buscadores de vivienda “pet friendly” (amigable con las mascotas) generalmente desean contar con instalaciones “ad hoc” que les permitan convivir con perros, gatos, pero también aves, y hasta tortugas y serpientes.
Sin embargo, en las normas de muchos complejos de apartamentos sobre todo en las metrópolis no se permite coexistir a los inquilinos con sus amigos con plumas, garras o pezuñas.
La Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado 2021, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reveló que 73,4% de la población del país cohabita con una mascota, pero muchas personas dicen no poder contar con un animal de compañía por no tener un “espacio adecuado”.
El sondeo fue confirmado por una encuesta de la firma Statista en México, elaborada a finales del 2020, en la cual 43% de las personas consultadas confesó que “la limitación de un espacio apropiado” fue la principal razón para no tener un animal doméstico.
Según el INEGI, en México, se contabilizan más de 80 millones de mascotas, cerca de la mitad de las cuales (43,8 millones) son perros, 16,2 millones gatos y el resto una variedad de animales domésticos pequeños. Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estiman que tener una mascota “puede incidir de forma positiva en la salud” pues “la interacción a cualquier edad con animales, puede disminuir los niveles de cortisol o la llamada hormona del estrés, así como reducir la agresividad”. “Por el contacto y caricias pueden ayudar a regular la tensión arterial y la frecuencia cardiaca. Al reducir la soledad se mejora el estado de ánimo”, indicaron.
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El relevamiento de Statista revela que los mexicanos que poseen una mascota principalmente lo hacen por tener “afecto” (53%), seguido de “compañía” (35%), aunque algunos refieren que favorecen la “integración familiar”, entre otras cosas.
Karina Gusi, directora nacional de ventas de Hábitta de Grupo CCIMA, señalo al diario especializado El Economista que el sector inmobiliario ya “detectó la importancia de tener espacios para mascotas”, pero que la tendencia se aceleró a partir de la pandemia de Covid-19.
Ello llevó a muchas constructoras a integrar en sus proyectos “espacios configurados únicamente para el esparcimiento, socialización e higiene de los animales de compañía, especialmente perros”.
“Más que un parque la gente busca no nada más poder llevar al perro a un lugar donde haga sus necesidades” sino a un lugar “para que tengan entrenamiento” y puedan “socializar con otros perros”, afirmó.
Por ello, algunas edificadoras de viviendas están incluyendo en sus proyectos sitios tipo “gymboree” (centro de estimulación), en los cuales los perros podrán jugar y entrenarse, pero también convivir con sus dueños.
De acuerdo con encuestas de las firmas Inmuebles24 y Vivanuncios, 93% de los dueños de mascotas convive con ellas en el hogar y 30% cuenta con más de un animal de compañía.
Una nota curiosa sobre la demanda de viviendas que permitan mascotas es que generalmente corresponde a personas de mediana edad o a ancianos que están solos, pero no los “millenials” (personas nacidas con el siglo), pero no se descarta que en el futuro aumente también en ese segmento de edad.
Hay muchas personas que “no quisieron hijos, pero sí tener compañía”, afirman los especialistas en temas inmobiliarios.
