El inicio de la basificación de 17,000 trabajadores transitorios de Petróleos Mexicanos (Pemex) inició un episodio de tensión entre la empresa y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), el cual reaccionó de manera incipiente.
De acuerdo con expertos en materia laboral, el éxito de ese ejercicio dependerá de sortear el conflicto que existe entre el Programa de Estabilidad Laboral (PEL) con el programa anual de austeridad de la empresa y una buena negociación con la dirigencia del sindicato, que permita beneficiar a trabajadores sindicalizados que llevan hasta 30 años trabajando como eventuales y, al mismo tiempo, colocar en cada uno de los puestos a trabajadores calificados.
El desencuentro entre la dirección de Pemex y el liderazgo nacional del STPRM comenzó a gestarse, al menos desde diciembre de 2019, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se basificarían a ese número de trabajadores.
El tema tomó notoriedad el 10 de enero pasado, cuando el director general de esa empresa productiva del Estado, Octavio Romero Oropeza, informó que, en cumplimiento de las instrucciones del presidente López Obrador, se llevará a cabo un programa de ascensos por escalafón y basificación de trabajadores transitorios, a partir de febrero de 2022 y hasta el término de esta administración. Advirtió que se les daría prioridad a los criterios de antigüedad y función estratégica. El ejercicio inició con 409 empleados de los servicios de salud.
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Al anunciar el comienzo del programa, el funcionario recalcó que no es un tema político, sino de justicia laboral y que el proceso será totalmente transparente y gratuito, por lo que exhortó a los trabajadores a denunciar inmediatamente cualquier anomalía o irregularidad que conozcan.
De acuerdo con la empresa y lo reiterado por el presidente de la República, ese proceso será al margen del sindicato, que, al menos públicamente reaccionó desde el lunes 2 de marzo, cuando petroleros de diversas secciones sindicales iniciaron una serie de manifestaciones para denunciar lo que ocurre en esa relación laboral.
Desde ese día, colocaron en instalaciones del sindicato mantas con mensajes de protesta contra la dirección de esa empresa productiva del Estado, en las que se solicita al presidente López Obrador intervenga para que “se libere el bloqueo de plazas” del cual está siendo objeto el sindicato, “de manera arbitraria”.
El 21 de abril pasado, el secretario general del Comité Ejecutivo General, Luis Ricardo Aldana Prieto se reunió con los 36 secretarios generales de los Comités Ejecutivos Locales (CEL) de esa organización sindical, para informarles que la administración de la empresa pretendía implementar el Programa de Estabilidad Laboral (PEL), el cual no fue consensado con el sindicato y afecta a los trabajadores petroleros y sus familias.
De acuerdo con el secretario general de la sección 45, Andrés de la Rosa Hernández, en esa reunión, el líder nacional les manifestó que ese programa anula o desconoce varias cláusulas del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) y que la dirección de Pemex quiere desconocer a la representación sindical.
Inmediatamente después, se convocó a asambleas extraordinarias en cada una de las 36 secciones del sindicato, las cuales se celebraron el 26 de abril. En ellas, los dirigentes seccionales sindicales explicaron a sus agremiados, una a una de las que consideran violaciones al contrato en las que incurre la administración de Pemex y sometieron a la aprobación de las asambleas un plan de acción de 11 puntos en el que destaca la otorgación de “todo el apoyo y facultades” al líder nacional, Aldana Prieto para la defensa del contrato.
Exponen dirigentes seccionales violaciones al Contrato Colectivo de Trabajo
Los dirigentes sindicales informaron a sus representados que, desde que llegó la actual administración fueron bloqueadas las plazas de manera arbitraria, lo cual ha generado que, para sacar el trabajo algunos de los empleados tienen que realizar las labores de dos puestos.
Además, que se han suspendido los llamados trabajadores transitorios, sobre todo en las seis refinerías en México, así como los que trabajan en los complejos petroleros, ductos y en áreas marítimas.
También les dijeron que se mantienen suspendidas las “fichas de trabajo” de nuevo ingreso para familiares de trabajadores activos.
Denunciaron que la falta de personal ha motivado, por ejemplo, que en el Hospital Norte de la CDMX se haya tenido que solicitar el apoyo de personal médico de otras secciones sindicales, con el fin de hacer frente a la carga de trabajo motivada por la pandemia de la Covid-19, particularmente de las secciones 34, 35 y 43. Eso debido a que durante la parte más grave de la pandemia esas instalaciones operaron hasta a 120% de su capacidad.
Asimismo, denunciaron que todas las plazas sindicalizadas las tienen condicionadas a cubrirlas únicamente 38 días al año.
De acuerdo con los líderes sindicales, las violaciones al CCT incluyen también la suspensión de aplicaciones definitivas para plazas vacantes; suspensión de créditos hipotecarios; falta de materiales quirúrgico y medicamentos en las unidades médicas y hospitales y retrasos de pago de prima de antigüedad, en algunos casos de hasta seis meses.
También reportan como violación al contrato el retraso de hasta año y medio en el pago de alcances y seguro de vida a las viudas de trabajadores fallecidos y el incumplimiento de créditos para personal sindicalizados. No se han otorgado créditos en los últimos tres años.
Adicionalmente, retrasos de hasta ocho meses para pagar el beneficio de prótesis dental y de hasta año y medio para autorizar el préstamo administrativo, cuando lo normal era una catorcena. También retraso de hasta un año en el pago de becas para hijos de trabajadores
Además, se ha prorrogado la atención médica por especialidad y cirugías, sobre todo porque no se han firmado los contratos con prestadores de servicios subrogados, por ejemplo, para las operaciones de rodilla.
Eso ha afectado también los servicios de tomografías, entre otros servicios de radiología en unidades médicas.
Además, denunciaron como violación al contrato el incumplimiento en la dotación de herramienta y mantenimiento en instalaciones; falta de dotación de ropa de trabajo y equipo de protección personal.
Aprueban plan de acción desde las bases
Los 36 líderes sindicales solicitaron a sus representados denuncie ante las autoridades administrativas de Pemex los incumplimientos, rezagos y violaciones del CCT que detecten.
Además, les pidieron que no acepten trabajar horas extras si no se apegan a lo establecido en el CCT y la Ley Federal del Trabajo. Eso quiere decir que sólo podrán trabajar tres horas extras por tres días a la semana, según la cláusula 51 del contrato.
Los instruyeron a trabajar únicamente si cuentan con el equipo de protección necesario, con base en lo establecido en la cláusula 73.
En ese mismo tenor, el sindicado instruyó a los empleados que los trabajos se deberán realizar con las herramientas adecuadas, conforme a la cláusula 166.
En el caso de realizar trabajos superiores a su categoría, deben exigir el pago correspondiente, según lo establecido en la cláusula 37.
De la Rosa Hernández, afirmó que cada uno de los trabajadores sindicalizados ocupan una plaza “que es patrimonio de una familia, de la que no debe haber restricciones, puesto que ya ha sido presupuestada y aprobada por el Congreso”.
Afirmó que el levantamiento de la suspensión de créditos hipotecarios y la firma del Contrato Colectivo de Trabajo que debió ocurrir el 1 de agosto de 2021 estaba condicionado a que el sindicato realizara el proceso de selección de su dirigencia locales y nacional, lo cual concluyó en 31 de enero de 2022.
Programa de Estabilidad Laboral choca con el Programa anual de austeridad: Xiuh Guillermo Tenorio
El consultor en asuntos laborales, Xiuh Guillermo Tenorio, explicó que el Programa de Estabilidad Laboral choca con el Programa Anual de Austeridad en el Gasto y Uso de Recursos para el ejercicio fiscal 2022, de Petróleos Mexicanos y sus empresas productivas subsidiarias, que impacta en áreas importantes de la empresa como las de mantenimiento y que mandata congelar o posponer la adjudicación de plazas vacantes.
La necesidad de generar ahorro y economías plasmadas en ese programa está generando tensiones con el Programa de Estabilización Laboral, que tiene como objetivo generar certeza en la relación sindicato-empresa, indicó.
El especialista destacó que el Programa de Estabilidad Laboral debe estar en sintonía con el Contrato Colectivo de Trabajo, pues es el que rige las relaciones laborales entre la empresa y el sindicato.
Por otra parte, expuso que la gran pregunta es quién va a cubrir las plazas: los que cumplen el perfil técnico requerido por el puesto o quienes, de acuerdo con el sindicato tienen más derecho.
Según lo establecido en el Contrato, si se jubila un trabajador, quien debe cubrir esa plaza es el empleado del nivel inmediato inferior que tenga más antigüedad. Eso sin importar si cumplen con los requerimientos técnicos de las plazas.
El problema es cuando se jubila un ingeniero altamente especializado, porque la empresa requiere remplazarlo con un experto, pero el CCT señala que debe ser relevado por el trabajador que ocupa el nivel inferior con más años trabajando en ese puesto.
Lógicamente, el sindicato lo que intenta es basificar a la mayoría de los trabajadores transitorios sindicalizados.
En ese sentido, Arturo Carranza, consultor en temas energéticos comentó que las políticas de austeridad implementadas por la presente administración federal motivaron que un número importante de cuadros directivos y personal calificado solicitaran su jubilación, lo cual generó la necesidad de contratar a ingenieros y especialistas en diversas áreas.
El especialista comentó que uno de los desafíos más importantes que enfrenta la empresa hoy es el de la formación y retención de talentos y, si bien es un asunto que lleva arrastrando durante años, es pertinente atender.
Por ello, subrayó que una política laboral como el Programa de Estabilidad Laboral tiene que estar en el centro de la política laboral de la empresa, aunque en este caso está dirigida principalmente a beneficiar al personal de confianza.
Dijo que el éxito de la implementación de este programa dependerá de muchos factores, incluyendo el respeto a lo establecido en el Contrato Colectivo de Trabajo, donde se estipula que, en todos los activos de Pemex, es decir en plataformas, centros procesadores y refinerías, etcétera, un porcentaje de las plazas laborales deben ser sindicalizadas.
Por ello, es preciso que, mediante una buena negociación con el sindicato, se pueda favorecer a personal sindicalizado con el otorgamiento de plazas a personal transitorio, sin que eso eleve los costos laborales por tener a personas que no son aptas para los puestos.
Xiuh Guillermo Tenorio explicó que en Pemex hay tres tipos de trabajadores provisionales: los eventuales, generalmente contratados para cubrir ciertas ausencias; el personal de confianza y los transitorios. No todos están sindicalizados.
Lo que podría ayudar es que muchas personas que laboraban en Pemex como eventuales están siendo contratados por la recientemente creada empresa Gas Bienestar.
Por otra parte, destacó que a la dirigencia nacional del sindicato le interesa mantener el diálogo con la empresa y, si bien se han visto ya algunas movilizaciones de sindicalizados en ciudades con instalaciones petroleras no han sido manifestaciones de fuerza como la que tiene uno de los sindicatos más grandes del país.
Asimismo, recordó que la dirigencia sindical tendrá la presión de entregar buenos resultados ante sus agremiados porque, de no hacerlo, pueden cobrárselo en la siguiente elección.
Lo que es un hecho es que, si esto no se llega a resolver pronto en las mesas de negociación Sindicato-empresa, sí se podrían ver manifestaciones más contundentes, incluso en la capital del país o en momentos importantes, abundó.
En ese sentido, el especialista recordó que está en marcha la construcción de la refinería de Dos Bocas, Tabasco y tiene fechas estratégicas mediáticamente que pudieran ser aprovechadas por el sindicato para manifestarse teniendo un impacto importante.
Desde su perspectiva, no hay que perder de vista que el secretario general tiene la necesidad de responder a las demandas de sus agremiados que han visto una oportunidad de basificarse y de ser necesario usará la capacidad de movilización de la que dispone y hacerse notar.
Basificación implicará invertir 5,300 millones de pesos entre 2022 y 2024: Arturo Carranza
De acuerdo con el consultor Arturo Carranza, actualmente Pemex tiene alrededor de 120,000 trabajadores entre sindicalizados y de confianza, de los cuales 80% son sindicalizados.
Recordó que de acuerdo con Pemex la basificación implicará una inversión de alrededor de 5,300 millones de pesos, entre 2022 y 2024.
Dijo que lo importante es que la basificación contribuirá a generar condiciones de estabilidad laboral.
Destacó que se trata de una cantidad relevante, aun si se compara con los ingresos de la paraestatal, que, por ejemplo, ingresó alrededor de 500,000 millones de pesos el trimestre pasado.
El hecho de que Pemex tenga a miles de trabajadores transitorios se explica, al menos en parte por el tipo de trabajos que se realizan en las diferentes áreas de la empresa. Por la dinámica misma de la industria petrolera al momento en el año donde las actividades se desarrollan intensamente, por ejemplo, en exploración y producción y se recurre a esquemas más flexibles no solo la contratación directa sino subcontratación.
Según información de Pemex, la empresa actualmente tiene una nómina de trabajadores activos de alrededor de 55,000 millones de pesos por año, que es casi el equivalente a los jubilados.
Disidencia asegura que lo que busca el sindicato es mantener privilegios
Fred Antonio Navarro López, excandidato a la secretaría General del sindicato petrolero afirmó que lo que realmente está detrás de las movilizaciones del sindicato es su inconformidad porque están perdiendo el control de las plazas que tenían hasta 2018.
Comentó que la inconformidad sobre las violaciones al Contrato Colectivo de trabajo prácticamente siempre ha existido y el sindicato no ha hecho mayor cosa por exigir que eso no ocurra.
Desde su perspectiva, lo que en estos momentos está ocurriendo es que la actual dirigencia nacional y prácticamente todas las dirigencias sindicales, cooptadas por el grupo de Ricardo Aldana, están manifestando su inconformidad al ser marginados los líderes sindicales del proceso para el otorgamiento de plazas definitivas.
Afirmó que durante años los líderes sindicales habían hecho un lucrativo negocio con el otorgamiento de plazas de planta.
Dijo que los trabajadores llegaban a pagar hasta 700,000 pesos por pasar de transitorios a trabajadores con planta, aunque los dirigentes se daban el lujo de recibir casas, automóviles o animales, sobre todo caballos de registro.
Comentó que en Tula hay trabajadores que tienen hasta seis años como eventuales, pero en secciones como las ubicadas en Tabasco y Tamaulipas hay gente que lleva hasta 30 años en esa situación.
Comentó que otra de las inconformidades de los líderes sindicales es que están temerosos de que la dirección de Pemex les haga efectiva su jubilación, pues muchos de ellos ya cumplen con los requisitos de edad y tiempo laborando, como para ser jubilados, pero como quieren permanecer como dirigentes, no lo han solicitado.
También denunció que, en algunas prestaciones como los préstamos hipotecarios, los dirigentes del sindicato también decidían a quien favorecer y prueba de ello es que a los disidentes nunca se los autorizaban.
Comentó que los dirigentes también pedían dinero para adjudicar las fichas a las que tienen derecho los trabajadores una vez que cumplen 10 años de antigüedad y que sirven para meter a trabajar a un familiar directo en la empresa.
Por su parte Pablo González, de la sección 48 de Villahermosa, denunció que el anuncio de la basificación de trabajadores de Pemex ocasionó una escalada de extorsiones por parte de líderes seccionales del STPRM.
Detalló que los citan a las instalaciones del sindicato, por ejemplo, de la sección 48 con sede en Villahermosa. Una vez ahí, les dicen que para incluirlos en la lista de los beneficiados con la basificación deben pagar 150,000 pesos en efectivo. Si no cuentan con esa suma, les ofrecen otorgarles un préstamo de la Caja de Ahorros por esa cantidad, les extienden un cheque, los mandan a cambiarlo al banco y les piden regresar con el dinero. Una vez que lo entregan los integran a la lista.
Aseguró que, en algunos casos, ya les han entregado la base a personas que han accedido a esa extorsión.
De acuerdo con el también excandidato a la dirigencia nacional del sindicato la empresa es la que está llevando a cabo la basificación por lo cual los trabajadores no deben dejarse sorprender.
Dijo que en el caso de la sección 47, con base en Ciudad del Carmen, están cobrando por las plazas de planta 350,000 pesos y también les ofrecen la opción de pedir un préstamo a través de la Caja de Ahorro para pagarlas.
Asimismo, comentó que las manifestaciones realizadas en los últimos días, organizadas por el sindicato, son medidas para presionar a la dirección de Pemex para que acceda a que esa organización sindical tenga el control en el otorgamiento de las bases laborales.
