Una jueza federal otorgó la tarde de este miércoles una suspensión definitiva con la cual ‘frena’ por tiempo indefinido la reforma judicial.

La jueza Quinta de Distrito en Morelos, Martha Magaña López, fue la encargada de conceder la suspensión contra el dictamen que pretende realizar diversos cambios al Poder Judicial de la Federación (PJF).

Los diputados se negaron a acatar esta orden, por lo que ahora, el efecto de la suspensión es que la minuta no sea discutida en el Senado, ni enviada a las legislaturas de los Estados para completar el proceso de reforma constitucional.

Anuncios

“(El dictamen) no podrá ser considerado y menos aprobado por la nueva legislatura y, deberán abstenerse de enviarlo a las Legislaturas de los Estados y de la Ciudad de México para su aprobación, hasta en tanto se resuelva en definitiva el juicio de amparo”, dice la resolución.

“En el momento que se encuentra el proceso legislativo, esto es ante el proyecto de iniciativa de reforma constitucional que será votado en la Cámara de Senadores para posterior a ello ser avalado en las legislaturas locales, es factible suspender el acto reclamado para analizarlo, a la luz de las inconformidades de los quejosos, al no haberse materializado”, agrega.

El presidente del Senado, el morenista Gerardo Fernández Noroña, ya adelantó hoy que nada detendrá el proceso de reforma, por lo que es previsible que esta suspensión será ignorada, como otras resoluciones judiciales de los últimos dos años que el Congreso no ha cumplido, entre ellas varias de la Suprema Corte de Justicia.

De hecho, la Cámara alta anunció que discutirá el dictamen en comisiones el domingo, con la idea de pasarlo a Pleno a mediados de la semana.

Ante la violación a una suspensión, los jueces sólo pueden denunciar el probable delito de abuso de autoridad ante la FGR, que en los últimos años ha recibido varias querellas de este tipo contra altos funcionarios del Gobierno, pero no ha actuado contra ninguno.

El efecto de no enviar la reforma a los Congresos locales también está previsto en la suspensión provisional que un juez federal de Chiapas concedió el sábado, misma que no prohíbe la aprobación en ambas cámaras del Congreso de la Unión.

La jueza Magaña concedió la suspensión en un amparo promovido por cuatro jueces federales, que al igual que la mitad de sus colegas de todo el País tendrán que someterse a elección por voto popular en junio de 2025, o dejar el cargo.

En 2022, la Suprema Corte emitió jurisprudencia que establece que la Constitución no puede ser revisada por el Poder Judicial por medio de amparos, pero la jueza considera que sólo está interviniendo en el proceso legislativo, aunque para ello, se está pronunciando sobre el contenido de la reforma.

“Si a los quejosos se les pretende cesar de sus cargos de jueces federales sin derecho de audiencia y sin derecho a indemnización alguna, bastando para ello reformar el texto de la Constitución, es claro que la suspensión debe otorgarse para efecto de que el acto que reclaman no se formalice en la norma suprema, pues de hacerse cabría la posibilidad de ser inatacable”, dice la suspensión.

Publicidad