La Iglesia Católica se unió a los llamados de justicia y seguridad por las y los periodistas en México, cuya labor es amenazada por la ola de violencia bajo la cual, hace unos días, se intentó atentar contra la vida de Ciro Gómez Leyva.
Dicha agresión, comentó la institución, volvió a abrir la conversación y las exigencias por ofrecer condiciones seguras para que el gremio de la información pueda ejercer plenamente su labor. En ese tenor, afirmó que la violencia a los medios abarca más allá de los lamentables asesinatos, que han marcado al 2022 como el año más mortal para el periodismo en México, con 13 homicidios.
“La violencia contra los medios de comunicación (…) abarca censura, presiones de grupos de poder y condiciones precarias para quienes realizan la invaluable labor de informar a la sociedad”.
En ese sentido, la Iglesia pidió no criminalizar a los profesionales “que hablen con la verdad”, pues, afirmó, ésta es la que permite crear puentes de diálogo “para solucionar cualquier diferendo y alcanzar acuerdos de manera pacífica”.
En palabras del Papa Francisco: la misión de los periodistas es explicar el mundo, hacerlo menos oscuro, hacer que los que viven en él le tengan menos miedo y miren a los demás con mayor conciencia, señala el editorial religioso.
“La agresión hacia un periodista no debe ser el método para tratar de acallar su opinión o la información que da a conocer”, se lee en la más reciente entrega del semanario Desde la Fe.
Bajo ese tenor, la Iglesia hizo un llamado a establecer estrategias y procesos para alcanzar la paz y la justicia no sólo para los periodistas, también “en todo el territorio nacional”. En tanto, pidió que las condiciones del ejercicio periodístico garanticen la seguridad y se evite el menoscabo del trabajo.
Para finalizar la reflexión también se expresa: “los periodistas deben asumir el compromiso de comunicar la verdad con responsabilidad, hablar con la verdad no debe generar odios, ni rencores, ni mucho menos desencuentro, confrontaciones ni agresiones.”
