La Embajada de Estados Unidos en México, que encabeza Ken Salazar, cuestionó ayer la reforma eléctrica del Presidente Andrés Manuel López Obrador, después de que el diplomático fue criticado en su país por asegurar que el Mandatario mexicano “tiene razón” en buscar el cambio.

En un comunicado Salazar señaló que la reforma impulsa tecnologías sucias, anticuadas y caras que afectarán a los consumidores y a la economía.

“El Gobierno de los Estados Unidos ha expresado reiteradamente su preocupación sobre la propuesta actual del sector energético de México.

Anuncios

“Promover el uso de tecnologías más sucias, anticuadas y caras sobre alternativas renovables eficientes, pondría en desventaja tanto a consumidores como a la economía en general”, indicó en el comunicado.

El posicionamiento se difundió previo a la llegada hoy del Enviado de Estados Unidos para el Clima, John Kerry, quien sostendrá encuentros con el Presidente López Obrador y el Canciller Marcelo Ebrard.

En Baja California Sur, el Embajador Salazar recorrió la central termoeléctrica de Punta Prieta y el parque eólico El Coromuel en La Paz, así como una central eléctrica privada en Comondú, que serán conectadas al sistema eléctrico nacional.

“Las instalaciones solares y de viento que visitamos en Baja California Sur lo demuestran, podemos alcanzar resultados increíbles desplegando las más recientes tecnologías para avanzar la transición energética necesaria para combatir el cambio climático”, indicó el diplomático.

La semana pasada, el Embajador de Estados Unidos dijo que López Obrador estaba en lo correcto al buscar una reforma eléctrica, lo que generó críticas en medios estadounidenses al contradecir el mensaje de la Administración Biden de preocupación en torno a la propuesta mexicana.

Te puede interesar: Piden remover a embajador de EEUU en México por “apoyar” reforma energética

Para reafirmar la postura del Gobierno estadounidense, la Embajada manifestó que se escucharán “los puntos de vista del Gobierno mexicano en una gama de asuntos energéticos, mientras consultamos con empresas estadounidenses del sector privado para entender mejor cómo lograr nuestros objetivos energéticos y climáticos”.

Ayer, la American Chamber of Commerce (Amcham) dijo que las empresas estadounidenses tendrían que replantear su permanencia en México en caso de aprobarse la reforma eléctrica porque amenaza sus compromisos climáticos.

De aprobarse el proyecto, la electricidad generada por la CFE sería la primera en ser utilizada, cambiando el actual orden, que da prioridad a la energía más barata solar y eólica.

“Las grandes empresas americanas tienen compromisos climáticos tan serios como poder llegar a operar con el 80 o el 100 por ciento de energías limpias en la siguiente década”, dijo Ana López Mestre, directora de la Amcham, durante el parlamentario sobre la reforma eléctrica.

López Obrador se reunirá hoy con Kerry, en busca de financiamiento que permita modernizar el sistema de hidroeléctricas de la CFE, consideradas como una pieza clave de la reforma energética que discute el Congreso.

Publicidad