Los delitos graves bajaron casi un tercio y los homicidios un 4% en México, desde que inició, hace tres años, la gestión del presidente Andrés López Obrador, pero otros hechos ilícitos que calan hondo en la gente de la calle, como los robos, la extorsión y la violación, siguen una tendencia alcista.

El más reciente informe dado a conocer por la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, tiene un trasfondo de claroscuros, que muestra, sin embargo, una realidad atroz: la violencia sigue rampante, desde que la geografía nacional comenzó a teñirse de rojo a fines de 2006.

Desde diciembre de ese año, cuando el entonces presidente Felipe Calderón lanzó su fallida estrategia contra las bandas criminales, murieron hasta ahora 335,000 personas y se encuentran desaparecidas alrededor de 93,000, de acuerdo con reportes oficiales.

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Los estados de Guanajuato, Baja California, Michoacán, Estado de México, Chihuahua y Jalisco, que abarcan en los cuatro puntos cardinales del país, concentran la mitad de los asesinatos registrados en el país.

A nivel municipal, las regiones con peores índices de homicidios intencionales son Cajeme, estado de Sonora y Zamora, estado de Michoacán.

La funcionaria reconoció que se debe mejorar el trabajo en delitos que registran incrementos en los últimos tres años, que alcanzan niveles escandalosos como el caso del abuso sexual (28.1%) o preocupantes como el robo a transeúnte (9.3%), en transporte público individual (12.6%) y extorsión (12.3%).

Según sus datos, de enero a diciembre del 2021, se registraron 33,308 homicidios dolosos en el país.

Sobre el feminicidio la funcionaria informó que diciembre es el mes con menos de esos casos en lo que va del gobierno actual.

De esta manera, México registró 1,004 feminicidios en 2021 y 978 en 2020, lo que implica un alza interanual del 2.66 %.

El mes más violento en 2021 fue mayo, con 2,997 asesinatos, mientras que marzo de 2020 fue el mes con más homicidios bajo la actual administración, iniciada en diciembre de 2018, con 3,041.

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Los primeros dos años de mandato de López Obrador, son también los más violentos de la historia del país, con 34,690 víctimas en 2019 y 34.554 en 2020.

El presidente ha usado a las Fuerzas Armadas como su principal arma contra la violencia, lo que le ha generado duras críticas de la oposición y los analistas, que le echan en cara incumplir su promesa de campaña de “regresar a los militares a sus cuarteles”. 

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