Rechaza el presidente Andrés Manuel López Obrador tener a su disposición una “partida secreta”, como acusaron legisladores de oposición, una vez que se aprobó la Ley de Austeridad Republicana, con la cual, el Jefe del Ejecutivo podrá decidir el destino de los ahorros del con el adelgazamiento del gasto público.
“Ahora se acaba de aprobar la Ley de Austeridad y están inconformes, imagínense, están diciendo que lo que se ahorre lo va a manejar de manera discrecional el Presidente y que eso es equivalente a la partida secreta que manejaba Salinas”, recriminó el primer mandatario.
“Les diría yo… no puedo decirlo. No me comparen, ¡respeto por favor!”, señaló ante la prensa reunida en Palacio Nacional.
“Pero están muy nervioso nuestros adversarios. ¿Cómo va a haber partida secreta si una regla de oro de la democracia es la transparencia?”, remarcó, al aclarar enérgicamente: “no soy Salinas. No me comparen (…)Eso sí calienta, vamos respetándonos”, reclamó López Obrador.
El Senado recién aprobó la Ley de Austeridad Republicana con la que el Jefe del Ejecutivo puede decidir discrecionalmente, sobre los ahorros del presupuesto que, estima la oposición, alcanzarían los 125 mil 700 millones de pesos, por ahorros en compras consolidadas de medicamentos, y otras medidas de austeridad; López Obrador reiteró que la Secretaría de Hacienda hará los usos de los recursos y resaltó que la dependencia aplica procesos de transparencia y rendición de cuentas con el manejo del dinero público.
En esa línea prometió atender los reclamos de 50 trabajadores de Canal 11 que denunciaron esta madrugada frente a Palacio Nacional que fueron despedidos injustificadamente.
“Todo se va a aclarar” a detalle. “Vamos a informar por completo, cómo va a quedar en el gobierno”, finalizó López Obrador.