Aumenta la tensión entre Estados Unidos y China: la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, afirmó hoy que Washington “no permitirá” que Taiwán sea aislada por Pekín, que anunció que detendrá la cooperación con la Casa Blanca en áreas como las relaciones militares y el cambio climático.

El gobierno chino anunció además que impondrá sanciones contra Pelosi, y que intensificará sus represalias por su visita a Taiwán.

“Pueden tratar de evitar que Taiwán visite o participe en otros lugares”, dijo la demócrata por California en Tokio, en el final de su gira asiática. “No permitiremos qué aíslen a Taiwán”.

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“No aislarán a Taiwán impidiéndonos viajar allí”, reiteró la demócrata, horas antes de las sanciones en su contra.

Pelosi y el primer ministro japonés Fumio Kishida coincidieron en la importancia de la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán.

El jueves Estados Unidos reiteró su apoyo a Taiwán, subrayando que se opone a “cualquier esfuerzo unilateral para cambiar” su status quo.

China no tardó en responder, y anunció que detendrá la cooperación con los Estados Unidos en áreas como las relaciones militares y el cambio climático, al tiempo que impondrá sanciones contra la presidenta de la Cámara.

Las nuevas medidas se anunciaron a medida que avanzan los ejercicios militares que Pekín lanzó a raíz del viaje a principios de esta semana.

China inició el jueves operaciones con aviones de guerra, barcos navales y misiles amenazadoramente cerca de la pequeña democracia insular.

El gobierno de Pekín precisó que más de 100 aviones de guerra y 10 buques de guerra han participado en los simulacros militares con fuego real que rodean Taiwán en los últimos dos días.

La visita sin previo aviso de la delegación de Estados Unidos a Taiwán ha alimentado una crisis creciente, aumentando los temores de conflicto en la región.

Pekín anunció que cancelará las llamadas telefónicas entre comandantes militares regionales, las reuniones de defensa, las conversaciones sobre seguridad marítima y sobre el cambio climático con sus pares estadounidenses.

También dijo que pondría fin a la cooperación con Washington en los planes para enfrentar el narcotráfico, la devolución de inmigrantes ilegales y la delincuencia transnacional.

En cuanto a Pelosi, cuya visita a Taipei fue considerada una “provocación atroz”, China no especificó las sanciones.

Los aliados occidentales advirtieron sobre una peligrosa escalada entre las dos grandes potencias.

Estados Unidos convocó al embajador chino el jueves para presentar una protesta formal por las acciones de Pekín contra Taiwán y reiterar que Washington no quiere avivar una crisis en la región, confirmó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.

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Pelosi, en Japón para la última parada de su gira por Asia, dijo que no se permitiría a China tener éxito en sus esfuerzos por aislar a Taiwán.

China se opone a que la isla autónoma tenga sus propios contactos con gobiernos extranjeros.

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