¿Es inútil la vacuna contra el coronavirus? Un ejemplo de una noticia que surgió en Suiza que muestra cómo se propaga la desinformación a escala internacional y quiénes intervienen.
En los últimos años, ningún tema ha generado más noticias falsas (fake news) que el coronavirus. Sin embargo, aunque la pandemia haya terminado, la desinformación que genera parece estar lejos de desaparecer.
En abril, circuló la siguiente “noticia” en blogs griegos: Suiza ha retirado sus recomendaciones de vacunación y ha suspendido por completo las vacunas contra la Covid-19; además, cualquier efecto secundario de la vacuna se achacará a partir de ahora al médico que administre la dosis. También se afirmó que el Gobierno Federal había advertido del peligro de las vacunas.
Pues es todo falso.
La organización griega de verificación de hechos Ellinika Hoaxes ha rastreado cómo estas noticias falsas -que distorsionan la verdadera información facilitada por la Oficina Federal Suiza de Salud Pública (OFSP)- llegaron a Grecia a través de Alemania.
Varios medios de comunicación han abordado el tema
Todo empezó con un artículo que llevaba como título: “Confirmado oficialmente: la vacuna es peligrosa” en la revista suiza Weltwoche el 6 de abril. Al día siguiente, un portal alemán confirmaba lo siguiente: “¡Atención! Suiza retira todas las recomendaciones para la vacuna contra la Covid”. Veinticuatro horas después, la noticia llegó a un blog de Grecia y diez días más tarde también apareció en otro medio de comunicación que, al igual que el blog, también reprodujo las ilustraciones del portal alemán.
Grecia no fue un caso aislado. La “noticia” se difundió simultáneamente por todo el mundo. Simon Ming, de la OFSP, afirmaba haber recibido consultas al respecto de varias organizaciones. La agencia de noticias francesa AFP, el periódico estadounidense USA Today, la agencia de noticias india Press Trust of India, y otros medios hicieron sus propias comprobaciones y se pusieron en contacto con la OFSP.
¿Información errónea o desinformación?
La fuente de la noticia fue un anuncio de la OFSP que informaba que no se harían nuevas recomendaciones de vacunación contra la Covid-19 para la primavera y verano de 2023. La razón: el 98% de la población tiene anticuerpos contra el virus SARS-CoV-2 y, debido a la baja circulación prevista del virus, para las personas sin factores de riesgo la posibilidad de enfermar gravemente es prácticamente nula. Sin embargo, para las personas con especial riesgo, la OFSP recomienda la vacuna si el médico de cabecera lo considera apropiado.
Como el juego del teléfono escacharrado
Las noticias falsas que marcaron la ruptura con la información verídica de la estrategia de vacunación suiza aparecieron en blogs y redes sociales en versiones ligeramente modificadas, pero con idéntico contenido. Las noticias falsas similares suelen ser difundidas por portales y activistas de derechas y a menudo hacen referencia -o copian íntegramente- fuentes extranjeras.
Andronikos Koutroubelis, de Ellinika Hoaxes, lo confirma. “En Grecia, normalmente una persona crea o copia una contribución que luego es retomada o modificada por otros”. En el caso del coronavirus, suele tratarse de temas tomados de sitios web extranjeros, principalmente de Europa Occidental o Estados Unidos.
Este aspecto es crucial para la difusión, sobre todo en los espacios digitales de lenguas minoritarias. El contenido veraz de las noticias entra en un mecanismo similar al “juego del teléfono escacharrado y al final acaba siendo una información completamente distorsionada”, afirma Koutroubelis. Puede tratarse de una manipulación deliberada, pero a veces es sólo el resultado de un error de traducción, de una exageración o de pereza de no hacer las comprobaciones oportunas… Las noticias no siempre son falsas en un primer momento. “Las razones son muy diversas, pero a menudo influyen intereses económicos, porque se quiere atraer a la gente a la página y ganar dinero con la publicidad”.
El artículo original de Weltwoche recibió poca atención en Suiza. La revista es conocida por su postura crítica hacia las medidas tomadas por las autoridades durante la pandemia.
Suiza es principalmente un país receptor de Fake News
Lo que llevó a USA Today y a Press trust of India a hacer una verificación de los hechos fue la publicación de un activista de extrema derecha estadounidense que afirmaba lo siguiente: “Suiza, una nación no alineada (no está en la OTAN, la UE o los BRICS), se considera centro mundial de la industria farmacéutica. Con su declaración, el Gobierno suizo reconoce claramente que un análisis científico objetivo de la relación riesgo/beneficio de las “vacunas” no justifica la “vacunación” bajo ningún concepto”.
La neutralidad hace que Suiza sea especialmente digna de confianza en esta narrativa. También funciona en Grecia, asegura Koutroubelis: “Suiza se considera un país libre de escándalos. Una noticia (aparentemente) escandalosa adquiere así una dimensión adicional que alimenta la espiral de indignación, atrayendo clics”.
Ming, de la OFSP, señala que las noticias falsas relacionadas con el coronavirus que circulan en Suiza suelen proceder de “fuentes internacionales”. El hecho de que una noticia suiza haya sido amplificada y distorsionada en todo el mundo es bastante inusual.