Las puertas de Cuba se abren más a capitales foráneos que “ayuden” a la producción de alimentos, hoy más escasos a causa de la epidemia de la Covid-19.

“El gobierno busca acelerar la gestión, concreción y ejecución de inversiones para el crecimiento de las producciones de pollo, cerdo, ganadería bovina, así como la agroindustria de frutas y vegetales” publicó un medio oficial de prensa.

La apertura podría ser mayor si el gobierno aprueba la incorporación de empresarios extranjeros en la agroindustria azucarera y sus derivados, algo que aún estudiaba hasta hace poco.

Anuncios

La rama azucarera fue asumida como “estratégica” en Cuba pero al iniciarse el siglo 21 debió sufrir una contracción a causa de diversos problemas entre ellos la caída de la demanda mundial.

Las autoridades cubanas culpan al bloqueo estadounidense y sus efectos sobre terceros mercados de la vulnerabilidad de su economía, que sufrió un severo golpe al estallar la pandemia mundial. También se han reconocido errores organizativos en la rama.

Los alimentos, que hace años han sido considerados también como “estratégicos” en la isla se importaban en gran parte antes de estallar la epidemia a un costo de unos dos mil millones de dólares anuales.

“El repentino y severo corte causado por la Covid-19 llevaron al gobierno isleño a reafirmar su búsqueda de mas producción nacional para abastecer mejor el mercado interno y con menos importaciones”, explicó un economista local.

Agregó que la necesidad de mantener la industria turística crucial para la economía nacional “también ha servido de catalizador para los programas no solo para sectores nacionales sino de inversión extranjera”, estimó el experto.

Te puede interesar: Rumba contra el Covid-19 en Cuba

Hace poco estaban en manos de las autoridades locales cinco proyectos de inversión extranjera en la esfera alimentaria para ayudar al abastecimiento interno.

Uno de ellos se refiere a los “productos del mar” como el camarón y la prospección y del “cultivo” en estanques de la anguila. Otro proyecto se relaciona con la producción de confituras.

No obstante el experto consultado aseguró que “existen mas opciones en estudio”.

Cuba, con un sistema de bases socialistas, tiene reglas determinadas para la entrada de los capitales extranjeros.

En ese marco su gobierno ha reconocido que la economía nacional necesita de las inversiones extranjeras para dejar detrás su lentitud.

En cuanto a los alimentos las inversiones extranjeras se deciden también teniendo en cuenta una planificación centralizada, que el gobierno ha señalado no deben impedir operaciones ágiles que no vulneren el concepto.

“La voluntad oficial es resolver los complejos problemas que se enfrentan en el campo económico con novedades que no alteren la esencia del sistema cubano”, explicó el economista entrevistado.

Reconoció no obstante que es “difícil de pronosticar hasta donde lleguen esas transformaciones sin vulnerar el concepto”, consideró.

Publicidad