“Hoy en día, hemos documentado que 5,996 civiles murieron y 8, 848 resultaron heridos” desde el inicio del conflicto en Ucrania, informó hoy la jefa de la misión de monitoreo de los derechos humanos de la ONU en Ucrania, Matilda Bogner.
“Entre los muertos, agregó, hay 382 niños. Estos números reflejan incidentes individuales confirmados, los números efectivos son mucho más altos”.
Bogner presentó hoy el nuevo informe de la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre Ucrania.
“Desde la publicación del último informe, a fines de junio, la misión ha aumentado su presencia en Ucrania. Actualmente, nuestros representantes trabajan en seis ubicaciones en todo el país”, detalló la enviada de la ONU.
“Todos los días nos comunicamos con personas de todo el país, escuchamos a las víctimas que han sufrido violaciones de derechos humanos en el contexto del conflicto armado”, agregó Bogner.
Según la enviada de la ONU, los ataques contra civiles no solo han puesto en peligro su seguridad, sino que también los han obligado a vivir en condiciones humillantes, socavando sus derechos a la salud, educación, vivienda, comida y agua.
“Los intensos bombardeos también han tenido un impacto negativo en la libertad de religión o creencias. Muchos edificios religiosos han sido destruidos y dañados. Hasta la fecha -prosiguió Bogner- hemos registrado daños o destrucción de 252 instituciones médicas y 415 instituciones educativas, pero incluso en este caso los números reales son más altos”.
