Las indagatorias sobre corrupción abiertas recientemente parecen mostrar un nuevo impulso de la administración lopezobradorista por combatir el flagelo en los más altos niveles; no obstante, pocas han sido las medidas tomadas para erradicarla en la cotidianidad, se expuso en un análisis de InSight Crime.
“El presidente Andrés Manuel López Obrador empieza a mostrar señales de un compromiso renovado con esa causa (el combate a la corrupción), como lo revela la apertura de nuevas investigaciones por presuntos malos manejos ocurridos durante el mandato de su predecesor (Enrique Peña Nieto)”, se refirió en el artículo firmado por Parker Asmann.
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El expresidente Peña Nieto, agregó InSight, es un personaje central de las investigaciones contra el flagelo que se llevan en el país y llega en un momento en el que López Obrador necesita obtener logros en el combate a la inseguridad.
“Sin embargo, las acusaciones de corrupción contra presidentes y expresidentes son muy comunes en México, y López Obrador no ha hecho muchos avances para combatir la corrupción cotidiana desde que asumió el poder a finales de 2018”, se expuso.
InSight Crime contextualizó, con cifras del Inegi, que la corrupción ha aumentado en México, ya que se pasó de 14,635 víctimas de corrupción por cada 100,000 habitantes en el 2017 a 15,732 el año pasado.
Las investigaciones
En el artículo se destacó que como muestra del combate a la corrupción en los más altos niveles en México están casos como el de Emilio “L”, Odebrecht y los presuntos sobornos en Pemex, así como las recientes órdenes de aprehensión en contra de exelementos de la Policía Federal.
En el asunto de Emilio “L” y los supuestos sobornos para tener contratos con Pemex por parte de Odebrecht, InSight indicó que México es de los últimos países en el que hay consecuencias del escándalo, “el cual promete tener repercusiones en todo el sistema político del país”.
Se recuerda que los directivos de la empresa de origen brasileño aceptaron haber otorgado 6 millones de dólares en sobornos para tener contratos con Pemex, además de otros 4 millones de dólares entregados a Emilio “L” entre abril y noviembre del 2012.
En los presuntos sobornos en los que se involucra al expresidente Peña Nieto, la consultora recordó que están vinculados con la campaña a la Presidencia de México del 2012.
Apuntó que fue la firma Braskem, filial de Odebrecht y que construyó la planta de Etileno XXI, en Veracruz, la que “supuestamente transfirió millones de dólares a las cuentas de una firma asociada a… (Emilio “L”) en la época en que Peña Nieto estaba en campaña. Otro informe del MCCI (Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad) a comienzos de ese mismo año, sostuvo que Odebrecht también transfirió dinero a otra empresa vinculada a Lozoya durante la campaña.
“Peña Nieto y Lozoya, quien fue coordinador internacional de la campaña, negaron las acusaciones en el momento. Aunque Peña Nieto admitió haberse reunido con ejecutivos de Odebrecht, aseguró que nunca aportaron dinero a su campaña”, se refirió en el artículo.
Mientras que en el caso de las órdenes de aprehensión contra 19 exfuncionarios de la Policía Federal, se expuso en el análisis de la consultora, se debe a sospechas de malversación de recursos por 2,500 millones de pesos.
