México dice sí a lo que quiere como nación soberana y como gobierno a favor de los migrantes, sin que nadie “con tweet o sin tweet”, nos diga qué hacer, afirmó el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida.
Al encabezar la conmemoración del Día Mundial del Refugiado, en las instalaciones de la Secretaría de Gobernación, el funcionario afirmó que con las acciones de gobierno y sociedad en conjunto, México sabe decir “no a lo que no nos gusta”.
Afirmó que en México “damos la bienvenida a los refugiados que vienen a ganarse la vida y a buscar una oportunidad de trabajo, no a tratar de perjudicar a nadie y por ello, se puso en operación la Clave única de Registro de Población con carácter temporal para los refugiados”.
Recordó que mientras en 2013 hubo mil 300 solicitudes de refugio, para 2017 la cifra alcanzó más de 15 mil, con personas provenientes de 25 países, razón por la cual se aumentó para este año en 150 por ciento el presupuesto de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
También se incrementó en 84 por ciento la plantilla de personal de esa instancia, para dar una mejor atención a los solicitantes de refugio, quienes con la CURP temporal y gracias a varios acuerdos con distintas dependencias, podrán hacer efectivos sus derechos a la educación, salud y trabajo.
En su oportunidad, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, condenó los actos “crueles, inmorales y bajo todo criterio inaceptables, que se están verificando en Estados Unidos contra familias y, en particular, de niños”.
Si bien reconoció la potestad de aquel país para determinar sus políticas migratorias, éstas “no pueden incluir la separación de familias, el auténtico enjaulamiento de niños, ni el trato indigno que se les está dando y afecta su desarrollo emocional y psicológico.
Advirtió que la CNDH ha enviado a la Frontera Norte a visitadores adjuntos para conocer de primera mano la situación y convocó a que a través de las instancias consulares, se actúe de la manera más enérgica posible para garantizar los derechos de los mexicanos en Estados Unidos.
