México ha experimentado un proceso de militarización “inédito” en la historia del país a partir de la firma de acuerdos migratorios impulsados por EE.UU., denunciaron este martes desde la Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho (FJEDD).
En un informe titulado ‘Bajo la bota, militarización de la política migratoria en México’, la entidad firmante señaló que existe una mayor presencia de las Fuerzas Armadas en las zonas fronterizas. “Se han desplegado decenas de miles de estos elementos en las fronteras norte y sur de México, constituyendo muros militares o la llamada frontera vertical, contribuyendo además al proceso de externalización del control fronterizo promovido por EE.UU.”, sostiene el trabajo, en el que participaron también las ONG Derechoscopio (Baja California), Derechos Humanos Integrales en Acción (DHIA) (Chihuahua) y Uno de Siete Migrando (Chihuahua).
Las entidades también indican que son esos grupos militares los que realizan el mayor número de detenciones, muchas de ellas arbitrarias, que están “basadas en el perfilamiento racial o han conllevado abusos, sobre todo de mujeres”.
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“A los cuerpos castrenses se les ha adjudicado funciones en materia migratoria, en contra de las disposiciones normativas mexicanas, el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional de los refugiados”, cuestionan las organizaciones.
En ese sentido, recomiendan que la participación de las Fuerzas Armadas en el control migratorio debe ser restringida y extraordinaria, además de estar subordinada y complementada por labores de autoridades civiles.
“La autoridad competente para realizar controles migratorios es una autoridad civil capacitada y especializada en la protección de los derechos de las personas migrantes”, indica el documento.
Además, agrega que entre junio de 2019 y diciembre de 2020 las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional detuvieron a más de 152.000 personas tan solo en la frontera sur. Según los datos del Instituto Nacional de Migración (INM), en ese mismo periodo fueron presentados unos 190.000 migrantes.
“La decisión de militarizar la política migratoria y las fronteras mexicanas afecta a miles de personas migrantes, especialmente a las más vulnerables: personas que escapan de violencia extrema, desastres climáticos, racismo, gobiernos autoritarios, discriminación de género o por orientación sexual, esto es, población en necesidad de protección internacional”, advierte el texto.
Solo en abril, 234.088 personas trataron de cruzar de manera irregular a EE.UU. a través de la frontera con México y fueron detenidas por las autoridades estadounidenses, según estadísticas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de ese país (CBP, por sus siglas en inglés).
La cifra representa un nuevo récord de detenciones, al superar los 222.144 casos registrados en marzo, que se había reportado como el número más alto mensual desde el mismo mes de 2000, cuando llegó a 220.063.