Ponentes y diputados de la Comisión de Asuntos Sociales, Jóvenes y Niños, Intercambios Humanos, Educación y Cultura de EuroLat han coincidido en que para combatir la brecha de desigualdad entre Europa y América Latina se deben incrementar la inversión y las herramientas para la mejora de los sistemas educativos. 

La Comisión de Cultura se reunió hoy en el Senado español en el marco de la decimoquinta Conferencia de la Asamblea Parlamentaria Euro-Lationamericana (EurloLat), que se celebra del 24 al 30 de julio en Madrid. 

En su intervención, el exministro español de Asuntos Exteriores José Manuel García Margallo, coponente europeo ante la Comisión, subrayó el deterioro que ha provocado el impacto de la crisis del COVID 19, junto al incremento de los precios de la energía, que ha llevado a que aumente el índice de pobreza de Latinoamérica hasta los 17 millones de personas.

Por ello, ha indicado que la educación es un factor “estratégico” para combatir la pobreza y las desigualdades y ha solicitado proyectos de cooperación que permitan avanzar en este ámbito y ayuden a erradicar la pobreza, al tiempo que ha recordado que la Unión Europea es el mayor donante internacional para América Latina.

En esta línea, el coponente Alejandro Toro, de Colombia, refrendó este análisis, pero matizó que dichos proyectos incluyan medidas como la asignación de créditos blandos para los países, la condonación de la deuda o mecanismos de compensación de deuda por el cambio climático.

Toro denunció que en Latinoamérica el 10 % de la población genera el 77 % de la riqueza, mientras que el 50 % de las personas más empobrecidas sólo acumulan el 1 % de la riqueza.

Ante esta situación, pidió impulsar la movilidad social con políticas públicas estratégicas en educación y de lucha contra la desvinculación de la población rural.

Algunas áreas de población como los afrodescendientes, los indígenas o las mujeres tienen “aún mayores dificultades” para acceder a la educación, aseguró Toro en su intervención, por lo que, bajo su criterio, para que una familia salga de la pobreza y alcance un lugar en la clase media se necesitan doscientos años.

Por eso, apeló no solamente a los sectores públicos, sino también a la empresa privada para que “colabore más allá de pagar impuestos” y se comprometa más ampliamente.

Para concluir, la presidenta de la Comisión, la eurodiputada española María Soraya Rodríguez Ramos, cerró la sesión con el anuncio de que el próximo informe en el que deberán trabajar los miembros de este organismo versará sobre la cooperación y el diálogo en el sistema integral de cuidados en Europa y Latinoamérica. 

EFE

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