Los altos niveles de violencia y las carencias sociales que existen en México han puesto en riesgo a entre 145.000 y 250,000 niñas, niños y adolescentes que podrían ser reclutados por grupos delictivos, según un informe elaborado por la Red por los Derechos de la Infancia (Redim) y el Observatorio Nacional Ciudadano.
El estudio ‘Reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes por grupos delictivos’ ofrece un panorama sobre las condiciones de riesgo que enfrentan los menores de edad de ser coaccionados por cárteles del narcotráfico, pandillas y familias delictivas.
“Ser niño en México es un peligro porque el país pasa la peor crisis de violencia en la historia”, dijo este martes Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano, durante la presentación del estudio.
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Algunos de los factores que influyen en el fenómeno de reclutamiento son: el entorno familiar y la violencia en los hogares; la pobreza; el abandono; la deserción escolar; la falta de oportunidades; el contexto social; la cercanía a zonas con presencia de grupos delictivos, entre otros.
Además del engaño y reclutamiento forzado, el estudio asegura que las niños, niños y adolescentes se ven orillados a participar en actividades delictivas debido a la falta de alternativas que tienen para construir un proyecto de vida. Un académico consultado por los autores de la investigación contó que cuando le pregunta a sus alumnos qué quieren ser de grandes, frecuentemente escucha la respuesta: “Yo quiero ser narco”.
“La delincuencia suple las deficiencias del Estado en donde hay comunidades abandonadas; niños que no pueden ejercer sus derechos”, explicó Rivas.
El estudio advierte que el reclutamiento de menores de edad por parte de grupos criminales es un “fenómeno generalizado” en el país latinoamericano. No obstante, las “dinámicas delictivas varían considerablemente” en función de las organizaciones criminales y sus “estrategias operativas específicas” en cada parte del territorio.
Un agente ministerial explicó que las organizaciones criminales utilizan a los menores de edad para cometer cierto tipo de delito, en función de la legislación penal que hay en cada estado.
“Robo es el mayor delito que cometen los adolescentes. Tratan de hacerlo siempre sin violencia, sin contacto físico: insultan, amagan con arma de fuego, pero nunca golpean o recurren a la violencia física. Siempre que no haya violencia, el artículo 164 te excluye porque se trata de violencia moral”, apuntó el agente consultado sobre las penas para menores de edad.
Violencia contra niñas y mujeres
Por otra parte, las organizaciones sociales documentaron que en el caso de las niñas y adolescentes, además de las actividades ilícitas, están expuestas “al sistema machista”, lo que implica que tienen mayor riesgo de ser violentadas por parte de los integrantes de los grupos criminales.
“Se han reportado algunos casos en los cuales son tratadas como ‘esclavas sexuales’, como mujeres de los comandantes y miembros de la organización, sometidas a la planificación forzada, e incluso obligadas a abortar o a embarazos forzados”, denunciaron los autores.
