Jair García
Xalapa.- Luego de sesionar la tarde de este lunes, la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI) dio inicio al proceso sancionador contra el gobernador Javier Duarte de Ochoa, retirándole sus derechos partidistas a él y otros seis militantes.
Este es el primer paso a la expulsión del mandatario veracruzano, la cual podría ocurrir en las próximas semanas.
Junto al gobernador, serán sancionados en el mismo sentido el ex subsecretario de Administración y Finanzas, Gabriel Deantes Ramos; el ex secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita; el ex delegado de la Secretaría de Economía, José Antonio Chara Manzur Beltrán, el ex director de Asuntos Jurídicos de la secretaría de desarrollo social en el estado, Juan Carlos Rodríguez García; el notario nombrado por el gobernador, Israel Ramos, hijo del director general de registro público de la propiedad, Raúl Ramos Vicarte; y el también notario Daniel Cordero.
De esta forma, el gobernador Javier Duarte de Ochoa prácticamente queda sin voz ni voto dentro del PRI, y únicamente tendría derecho a una comparecencia previa a su expulsión, como una garantía de ser escuchado por última vez dentro del Revolucionario Institucional. Lo mismo con los demás funcionarios, si aún desean pertenecer dentro de dicho partido.
Cabe mencionar que los miembro de la Comisión de Justicia Partidaria votaron por unanimidad la suspensión temporal de los derechos como militante al gobernador Javier Duarte, así lo confirmó en conferencia de prensa Arturo Zamora, miembro de esa Comisión.
Es la primera vez en la historia que se le suspenden sus derechos a un gobernador en funciones y con ello se rompe el pacto de impunidad al interior del otrora poderoso PRI.