Incertidumbre es, quizás, la palabra que mejor resume la interna que enfrenta el peronismo ante las elecciones presidenciales de Argentina en 2023. Ni siquiera se sabe si habrá elecciones internas o un candidato único, cuando falta un mes para la fecha límite de presentación de aspirantes.
Las certezas son pocas: una de ellas es que la actual vicepresidenta reiteró que no será candidata, a pesar del “operativo clamor” que lanzaron sus seguidores más cercanos para convencerla de que revierta su anuncio de que no será candidata “a nada”.
La otra, que el presidente Alberto Fernández declinó buscar su reelección.
El presidente, que por el momento no apoyó públicamente a ningún candidato, insiste en la importancia de que la coalición de gobierno del Frente de Todos participe de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (las llamadas PASO) con varios candidatos, algo que nunca ha sucedido en el peronismo.
Algunos de sus socios en la coalición no parecen compartir su visión. Sergio Massa, actual ministro de Economía y al que varias encuestas señalan como el mejor posicionado para competir por la presidencia, ya se ha expresado públicamente en contra de esa opción. Sin embargo, aún no confirmó si será candidato.
Quienes sí han expresado su voluntad de competir por la candidatura presidencial son el actual jefe de Gabinete, Agustín Rossi, y el embajador en Brasil, Daniel Scioli, quien perdió ante Mauricio Macri los comicios presidenciales de 2015.
Otro es el dirigente social Juan Grabois, quien ya incluso hizo su lanzamiento formal con la consigna “Argentina Humana, Juan 23”, con remembranzas a ese Pontífice y quizás a la cercanía que supo tener con el papa Francisco.
Grabois, crítico del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y de la gestión de Massa, realizó su acto de lanzamiento el 19 de mayo, donde sostuvo que “acá hay un candidato a presidente”, y que “vamos a ganar las PASO, porque va a haber PASO y vamos a garantizar la más fuerte batalla contra la derecha rancia, neoliberal”.
Mientras las primarias siguen sin confirmarse dentro del peronismo, otro que ya se anotó para participar fue Claudio Lozano, exdirector del Banco Nación y líder del espacio Unidad Popular.
A la espera de la decisión de CFK
Si bien ya ha dicho que no será candidata, todos están pendientes de la decisión final de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que hasta el momento evitó dar demasiadas precisiones.
En una entrevista que dio el 18 de mayo dijo que “ganar las elecciones depende de que volvamos a enamorar a la sociedad, de que volvamos a convencerla de que hubo un tiempo en que vivimos mejor”. Allí también elogió al ministro de Economía Massa, quien según ella “agarró una papa caliente”.
Massa, expresidente de la Cámara de Diputados, se tomó de esas palabras durante un acto: “No soy de los que se asustan frente a un desafío. Cuando había que agarrar la papa caliente, muchos de los que hoy se pasean por los canales de televisión hablando vanidosamente de candidaturas, se metían abajo de la cama. Nosotros nos paramos, pusimos el cuerpo y nos hicimos cargo”.
Pero en esa misma entrevista, la vicepresidenta también dijo que espera que “los hijos de la generación diezmada sean los que tomen la posta”. La referencia es a la generación de quienes enfrentaron a la dictadura en los años 70, entre los cuales muchos terminaron desaparecidos. Por eso, varios interpretaron sus palabras como un apoyo al ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, hijo de desaparecidos y una de las personas de confianza de la vicepresidenta, al que dentro del peronismo algunos señalan como posible candidato.
Al día siguiente, De Pedro, que ha comenzado a tener mayor exposición pública y ha dicho que, políticamente, haría lo que Fernández de Kirchner le indique, dijo: “Soy de una generación que le podemos decir la generación de la esperanza, y es bueno que la Argentina, a 40 años de la vuelta de la democracia, empiece a hacer una transición generacional en todos los ámbitos. Porque el mundo cambió. Soy de una generación que está tomando protagonismo, y es bueno que empecemos a hacer una transición generacional”. De Pedro es uno de los funcionarios que, aun siendo parte del gobierno, ha exteriorizado las críticas del kirchnerismo al presidente Fernández, algunas veces explícitamente, otras sin mencionarlo.
Ahora la expectativa está puesta en el acto del 25 de mayo (Día de la Patria) en Plaza de Mayo, donde se conmemorarán también los 20 años de la llegada de Néstor Kirchner al poder, con la vicepresidenta como oradora.
¿Ungirá a un candidato, como hizo con Fernández en 2019? ¿Abogará por definir la candidatura a través del sistema que ella impulsó en 2009 cuando era presidenta (las PASO) y que nunca utilizó? Habrá que ver si dice algo que ayude a ordenar la interna del peronismo. Pero hasta ahora se limitó a convocar al acto: “Los espero a todos en la Plaza”.
