La Paz.- El viceministro de Turismo de Bolivia, el gobernador y el alcalde de Potosí, así como el edil de Sucre presentaron hoy su renuncia, en medio de una crisis política y social que se ha desatado en el país luego de los comicios generales del 20 de octubre pasado.
El viceministro de Turismo, Marcelo Eduardo Arze García, presentó su renuncia al cargo ante la ministra de esa cartera, Wilma Alanoca, en una carta que circuló en redes sociales, pero que después fue confirmada por el mismo funcionario.
El alcalde de Sucre, Iván Arciénega, del partido gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), también presentó este sábado su renuncia en una escueta carta, informó el periódico Página Siete.
“Hago conocer mi renuncia irrevocable a cargo de alcalde por una solución pacífica al conflicto que vive el país, que se restablezca la democracia, el orden constitucional y los plenos derechos de la gente por una Bolivia unida”, indicó Arciénega, en su carta.
El gobernador de Potosí, Juan Carlos Cejas, y el alcalde, Williams Cervantes, también presentaron su dimisión ante las crecientes confrontaciones que se registran en el país, protagonizadas por los movimientos cívicos opositores que demandan la renuncia del presidente Evo Morales, y los grupos afines al gobierno.
Cejas, del MAS, destacó que su renuncia es para evitar que se registren más enfrentamientos entre bolivianos, así como para proteger a sus familiares que se ven afectados por estos conflictos, reportó el periódico La Razón.
“Vamos a dejar el cargo porque no queremos ver enfrentamientos en Potosí, no queremos ver enfrentamientos entre potosinos, pero también reitero, es para proteger a mi familia, no es otro, es para no arriesgar a mi familia, tengo una tía, tengo mis sobrinos”, declaró Cejas al diario.
El alcalde William Cervantes fue presionado por los pobladores de Potosí para que presentara su dimisión.
Cervantes, también del MAS, se presentó en una concentración que se llevaba a cabo en Tinkuy, una de las principales avenidas de Potosí, en demanda de la renuncia del presidente de Bolivia, Evo Morales, donde fue presionado para que firmara su dimisión.
“Pedimos la paz, queremos que vivamos en paz, yo estoy presente porque nos ha dolido mucho las agresiones que sufrieron los potosinos. Estamos al lado del pueblo pidiendo la paz”, declaró el ahora exalcalde.
En la concentración de Tinkuy, dirigentes del Comité Cívico de Potosí, mineros y civiles obligaron a Cervantes a acompañar otra caravana, integrada por mineros, y que se dirige hacia la sede del gobierno nacional, en La Paz.
Una primera caravana de autobuses con representantes de los comités cívicos de Potosí, Chuquisaca y Tarija, fue emboscada y atacada en la localidad de Vila Vila, carretera de Oruro hacia La Paz, la capital del país.
Grupos de campesinos afines a Morales habrían atacado la caravana que también estaba integrada por estudiantes, comerciantes y miembros de otros sectores que exigen la renuncia del presidente.
La caravana fue agredida con piedras, palos y gases lacrimógenos provocando entre ocho y 12 heridos, mientras que otras 10 personas habrían sido tomadas como rehenes.
Las dimisiones presentadas este sábado por los funcionarios bolivianos se dan en el marco de una jornada marcada por el amotinamiento de la policía a nivel nacional, manifestaciones, y llamados del presidente Morales y de las Fuerzas Armadas a la pacificación y al diálogo.
Bolivia vive una crisis social y política que se intensificó luego de los comicios generales de 20 de octubre pasado, que Morales ganó para un cuarto mandato, en medio de protestas de la oposición que desconoce los resultados de las elecciones y pide la renuncia del mandatario.