El Colectivo de Madres Buscadoras de Sonora logró que la Fiscalía General de la República (FGR) atrajera los casos de desaparecidos denunciados por la organización, además de que se investigarán las amenazas lanzadas contra la fundadora y líder del grupo, Ceci Patricia Flores Armenta.
Esto luego de que la mañana de ayer instalaron una tienda de campaña ante el edificio sede de la FGR en la Ciudad de México y anunciaron una huelga de hambre, tras lo cual fueron recibidas por el titular de la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada, Abel Galván Gallardo, quien se comprometió a atender sus denuncias.
Flores Armenta señaló que también lograron que la autoridad federal investigue el asesinato de Arantza Ramos, integrante del colectivo, quien exigía solución por la desaparición de su esposo, hecho ocurrido en diciembre de 2020, y quien fue asesinada a balazos en Guaymas, Sonora, el 15 de julio pasado.
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Añadió que también se logró que la FGR levantara la denuncia federal por la desaparición de su hijo y el compromiso de que el resto de los casos denunciados por el colectivo serán desahogados.
“Más que nada que nos reconocieran como colectivo, para que cuando hagan mesas de trabajo en la fiscalía también nos tomen en cuenta”, señaló Flores Armenta, quien informó que firmaron una minuta con todos los acuerdos, por lo que regresarán a Sonora para continuar con la búsqueda de sus familiares.
En entrevista, Flores Armenta afirmó que tuvieron que venir a la capital del país debido a la falta de soluciones por parte del gobierno estatal, ahora encabezado por Alfonso Durazo Montaño: “yo fui la semana pasada a Sonora y sí estuve ahí en Gobernación, pero igual, con las mismas promesas del gobierno anterior, nosotros no queremos promesas, queremos hechos y que nos ayuden”.
