En una entrega de becas antes cientos de estudiantes guerrerenses concentrados en las instalaciones de la Liga Municipal de Baloncesto del Valle de Iguala, el presidente Andrés Manuel López Obrador apostó por una investigación que dé con el paradero de los 43 normalistas rurales de Ayotzinapa, y con la verdad que aclare los hechos del 26 y 27 de septiembre del 2014, cuando una detención de policías municipales derivó en la desaparición de los jóvenes.
“Ya no queremos, no deseamos que Iguala, que este pueblo tan noble, tan trabajador de gente buena, honesta, esté vinculada con esos hechos horrendos que se dieron en esta región. Ya queremos que eso se limpie y que iniciemos, conociendo la verdad, una etapa nueva en Iguala, en Guerrero y en todo México”, vislumbró.
“Tenemos que saber la verdad, eso es una prioridad del nuevo gobierno, saber donde están los jóvenes de Ayotzinapa”, enfatizó el primer mandatario. López Obrador garantizó que la federación resguardará incluso legalmente a quienes contribuyan con el hallazgo de los jóvenes normalistas y que se conozca la verdad sobre su desaparición desde hace más de 4 años y 4 meses.“Ya se intregró para eso una comisión y se van a dar todas las garantías a quienes ayuden a que entre todos conozcamos la verdad y, sobre todo, que sepamos de los jóvenes, donde están los jóvenes de Ayotzinapa”, subrayó López Obrador.
En una tarde dónde desde la caseta de entrada al municipio de Iguala, familiares encabezados por la señora Esther Velázquez Villegas, mamá de José Luis Abarca Velázquez, quien era el presidente municipal cuando desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa y actualmente está acusado de delincuencia organizada, lavado de dinero y vinculado con la desaparición de los muchachos, detuvieron el vehículo en la que viajaban el presidente López Obrador para demandar la liberación del ex alcalde de Iguala y de su esposa María de los Ángeles Pineda mientras elevaban carteles con leyendas como “pedimos su intervención”, “Abarca-Pineda, inocentes”, “Revisión del caso”.
En el mitin, el presidente López Obrador manifestó que “hay desde hace tiempo personas encarcelada, hay quienes sostienen que están ahí de manera injusta, que ellos no fueron responsables. Ahora se abre de nuevo la investigación para que todo aquel que quiera ayudar a que se conozca la verdad sobre Ayotzinapa, va a tener protección y va a ser considerado como lo permiten las leyes”.
En esa línea prometió a todo el que ayude a informar sobre el caso que “va a tener consideraciones legales y va a tener protección del gobierno, porque nos importa mucho saber la verdad y el paradero de los jóvenes de Ayotzinapa”.
Al entregar becas de un universo de 6.7 millones para alumnos empobrecidos de educación inicial y básica a las madres, de recién nacidos hasta 15 años, pago bimestral; 4.1 millones de estudiantes de bachillerato; y 300mil becas a estudiantes de educación superior, además de 200 mil becas de servicio social , manutención y movilidad, Leticia Ánimas VargasCoordinadora Nacional Becas Bienestar, apuntó que “el viejo régimen neoliberal producía pobres; sus programas sociales servían para robarse parte del presupuesto destinado enfrentar precisamente la pobreza y los pobres eran mercado electoral.
El día de las elecciones, los programas destinados a ellos servían para chantajearlos ‘quieres seguir cobrando vota por tal partido’. En esa humillación, doblada de simulación, vivieron los programas sociales del viejo régimen y el resultado era atroz: los jóvenes generaban votos y pobreza”.
Al arengar el clásico “vivan los estudiantes”, el presidente López Obrador recordó la máxima de los años 1970, esa de “ser joven y no ser revolucionario es una contradicción” como dijera el chileno Salvador Allende, “un hombre de esos que nunca mueren, un gran presidente que fue víctima de un golpe de estado”, apuntó López Obrador.
El 11 de septiembre de 1973, “yo estudiaba el primer año de la Facultad en Ciencias Políticas (UNAM) cuando dieron ese golpe de estado. Me marcó, por eso yo no acepto las dictaduras, las imposiciones; por eso quiero que en México y en todos lo pueblos del mundo haya democracia y haya justicia”, comentó el primer mandatario. “Estaremos 6 años en el gobierno. La justicia tarda, pero llega, cuando hay voluntad de cambio”, finalizó López Obrador.
