El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump (2017-2021), se declaró inocente este jueves de los cargos que se le imputan en Georgia por intentar manipular los resultados de las elecciones de 2020, en las que perdió por un estrecho margen ante el demócrata y actual mandatario, Joe Biden.
Trump, que opta a la nominación del Partido Republicano para las presidenciales de 2024, ya se ha declarado no culpable en los otros tres procesos penales en los que está imputado.
Sus abogados interpusieron este jueves ante el tribunal del distrito de Fulton, Georgia, un documento en el que el expresidente se declara no culpable de los 13 delitos que se le imputan y renuncia “libre y voluntariamente” a su derecho de estar presente en una lectura de cargos formal en una corte.
El documento, encabezado por la frase en mayúsculas “Declaración de inocencia del presidente Trump y renuncia a comparecer en la lectura de cargos”, lleva la firma del expresidente al final, en señal de que está de acuerdo con lo que escribieron sus abogados.
La lectura de cargos contra Trump y los otros 18 imputados en Georgia estaba programada para el próximo 6 de septiembre e iba a tener lugar en una audiencia pública, es decir, con la posibilidad de que asistiera la prensa.
Sin embargo, como Trump ya se declaró este jueves no culpable, no tendrá que viajar a Georgia para presentarse ante el juez.
Para imputar a Trump y a 18 de sus antiguos aliados, la fiscal del distrito de Fulton, la demócrata Fani Willis, ha usado la ley RICO (por sus siglas en inglés), conocida por emplearse contra los integrantes de la mafia y utilizada para garantizar que los líderes de una asociación criminal, y no solo sus subordinados, rindan cuentas ante la justicia.
El exmandatario ya acudió a Georgia hace una semana para que lo ficharan y le hicieran la fotografía policial. Estuvo en la cárcel del condado de Fulton apenas 20 minutos y quedó en libertad bajo fianza de 200 mil dólares.
Trump es el primer expresidente de la historia de Estados Unidos que ha sido imputado y ya acumula cuatro casos penales.
Además de Georgia, afronta un proceso judicial en Nueva York por los pagos irregulares que hizo durante la campaña de 2016 para silenciar a la actriz porno Stormy Daniels por un “affaire” que habían tenido en el pasado.
Asimismo, se enfrenta a la justicia en Florida por haberse llevado a su mansión en Mar-a-Lago, papeles clasificados cuando dejó la Casa Blanca en enero de 2021 y, por último, debe responder en Washington al asalto al Capitolio de 2021, en el que sus simpatizantes intentaron interrumpir el proceso legislativo para certificar la victoria de Biden en 2020.