La reforma anticorrupción obligó a modificar la normatividad relacionada con los procesos de fiscalización en el país. A partir del ejercicio fiscal 2016, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) está obligada a presentar tres entregas parciales de sus informes de resultados de cada año.
En la primera entrega de resultados correspondientes a 2016, presentada por la ASF el pasado mes de junio, en la que se incluyen una parte del total de las auditorías practicadas al ejercicio de los recursos federales, se informa que 17 estados de la república presentan serias inconsistencias e inobservancias a la normatividad que establecen la Ley de Coordinación Fiscal y otras disposiciones jurídicas. Pero todavía faltan las entregas del mes de octubre y la última, a más tardar el 20 de febrero de 2018, que deberá presentar esa instancia fiscalizadora.
Esto quiere decir que el monto total con problemas en cada una de esas entidades federativas, se conocerá hasta esa última entrega.
Por lo pronto, a Veracruz no le fue nada bien en esa primera entrega del voluminoso informe de resultados de la Cuenta Pública 2016. En cada uno de los Fondos que se reportan, se aprecia la existencia o presunción de irregularidades en el manejo de los recursos que la federación transfiere a los estados, los famosos Fondos Federalizados.
En lo concerniente a Veracruz, y sólo en los fondos auditados hasta ahora, se reflejan fuertes sumas incluidas en el apartado de Recuperaciones Probables, o sea, dineros que deberán reintegrarse a la Federación por no haber acreditado su uso correcto (por haber sido desviados a fines distintos a los que marca la ley).
Cabe señalar que el proceso de fiscalización establece plazos legales para la atención, aclaración y solventación de las observaciones de auditoría. Los pliegos de observaciones no solventadas, dan pie a procedimientos resarcitorios, que no son otra cosa más, que la devolución íntegra de los recursos a la SHCP.
En ese Informe de Resultados de la Cuenta Pública 2016, se establece lo siguiente:
Del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), 920.4 millones de pesos, corresponden a Recuperaciones Probables, debido a que no se registra una gestión eficiente y transparente.
Del Acuerdo de Coordinación entre la Secretaría de Salud (federal) y el Estado de Veracruz, relativas a aportaciones federales para el Seguro Popular 2016, otros 303.9 millones de pesos, se incluyen como probable daño a la hacienda pública federal, y también van a recuperaciones, debido a que SEFIPLAN no transfirió esos recursos a la dependencia ejecutora.
Del Programa de Inclusión Social, que incluye el componente de salud del programa Prospera, la cantidad de 316.0 millones de pesos va a recuperaciones probables debido a que la SEFIPLAN no la transfirió a la ejecutora.
Del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF), cuyos recursos deben destinarse al fortalecimiento de las finanzas públicas, a la amortización de la deuda pública y a fondear obras y acciones que apoyen el crecimiento económico, el desarrollo social y los servicios públicos, el informe determina Recuperaciones Probables por un importe de 1,651.6 millones de pesos.
Esta cantidad se compone de 252.2 millones de pesos, transferidos a otras cuentas bancarias, y 1,399.4 millones de pesos, que fueron destinados al pago de la nómina de docentes y administrativos de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), en contra de lo que señala la Ley de Coordinación Fiscal.
Pero de este Fondo federal, también detectaron que 350.2 millones de pesos, se destinaron indebidamente al pago de intereses bancarios y no a la reducción de la deuda pública.
Como ya se señaló, aún faltan dos entregas por reportar de la fiscalización del ejercicio 2016. Las cifras a devolver a la Federación pueden incrementarse.
En un momento dado, y si el Estado no demuestra el buen uso de esos recursos federales, tendría que tener la disponibilidad financiera para realizar la devolución de esos 3,191.9 millones de pesos observados por la ASF al ejercicio 2016.
Por ser de un ejercicio fiscal que incluye un mes de la administración actual, y toda vez que se habla de recursos que podrían haber estado en las cuentas bancarias al momento de la entrega-recepción por cambio de gobierno, los resultados de este Informe de la ASF, seguramente están siendo analizados y revisados con lupa en la SEFIPLAN y la Contraloría General del Estado.
