El fallecido diseñador Giorgio Armani instruyó a sus herederos para que vendan gradualmente la casa de moda que creó hace 50 años o busquen una salida a bolsa, según su testamento, lo que desencadenó una carrera por el control de una de las marcas más conocidas del mundo y un cambio importante para una compañía altamente protectora de su independencia y sus raíces italianas.
El diseñador, conocido en la industria como “Rey Giorgio”, murió el 4 de septiembre, a los 91 años y sin hijos que hereden su imperio de la moda, que los analistas de la industria valoran entre 5,900 y 14,000 millones de dólares.
El testamento, que comprende dos documentos presentados ante notario en marzo y abril de este año respectivamente y revisados por Reuters, establece que los herederos deben vender una participación inicial del 15% en la casa de moda italiana dentro de los 18 meses posteriores a la muerte de Armani. Más tarde deberían transferir una participación adicional del 30% al 54.9% al mismo comprador entre tres y cinco años después de la muerte del diseñador.
El testamento también dice que se debe dar prioridad al gigante del lujo LVMH, el peso pesado de la belleza L’Oreal, el líder en gafas EssilorLuxottica u otro grupo de “igual posición” identificado por una fundación que el diseñador creó para preservar su legado con el acuerdo del socio comercial y vitalicio de Armani, Pantaleo Dell’Orco.
La mención explícita de las ventas de participaciones y de los jugadores que cotizan en Francia como compradores potenciales es una sorpresa, dada la persistente negativa de Giorgio Armani a diluir su control o cotizar en bolsa su grupo de moda, que según los expertos de la industria sigue siendo atractivo a pesar de una desaceleración mundial del lujo.
Como alternativa a la venta del segundo tramo de acciones, se debe realizar una oferta pública inicial, en Italia o en un mercado de igual posición, dijo el testamento.
Este tipo de disposiciones son esencialmente vinculantes y podrían ser impugnadas en los tribunales si no se cumplen, según la asociación de notarios italianos.
EssilorLuxottica, controlada por los herederos del empresario italiano Leonardo Del Vecchio y con vínculos comerciales con Armani, dijo en un comunicado que consideraría un posible acuerdo.
El grupo francés de cosméticos L’Oreal, que tiene un acuerdo de licencia con el grupo Armani hasta 2050, también dijo el viernes que estudiará la oportunidad.
LVMH, controlada por el multimillonario francés Bernard Arnault, declinó hacer comentarios.
En un giro sorpresa, el testamento de Armani prepara el escenario para la venta del imperio de la moda
A lo largo de los años, la marca que revolucionó la moda moderna a través de sus chaquetas y trajes minimalistas recibió varios acercamientos, incluido uno en 2021 de John Elkann, vástago de la familia italiana Agnelli, y otro de la marca de lujo Gucci, cuando Maurizio Gucci aún estaba al mando.
Armani fue el único accionista principal de la compañía que creó con su difunto socio Sergio Galeotti en la década de 1970 y sobre la cual mantuvo un estricto control, tanto creativo como gerencial, hasta el final.
Deja atrás un negocio que generó ingresos relativamente estables, 2,700 millones de dólares en 2024, pero cuyas ganancias operativas se han reducido a menos del 3% de los ingresos, según los cálculos de Berenberg.
El testamento, que enumera seis tipos diferentes de acciones con diferentes derechos de voto, otorga a la Fondazione Giorgio Armani y Dell’Orco el 30% y el 40% de los derechos de voto de la empresa, respectivamente, lo que significa que juntos controlarían el grupo de moda con el 70% del total.
La fundación conservará una participación del 30.1% en una cotización y en una venta.
“La Fondazione … nunca poseerá menos del 30% del capital, actuando, así como garante permanente del cumplimiento de los principios fundacionales”, dijo el comité ejecutivo de Armani en un comunicado, y agregó que la fundación propondrá el nombre del sucesor de Giorgio Armani como CEO del grupo.
La junta de cinco miembros de la fundación estará presidida por Dell’Orco, de acuerdo con los estatutos. Otros miembros de la junta incluyen al socio de Rothschild, Irving Bellotti, el sobrino de Armani, Andrea Camerana, y dos personas ajenas a la familia, dijo a Reuters una persona cercana al asunto.
Los herederos deben considerar otras compañías de moda y lujo con las que el grupo Armani tiene vínculos comerciales para una futura venta, también dijo el testamento.
El grupo Armani tiene asociaciones comerciales tanto con L’Oréal como con EssilorLuxottica.
Sin embargo, con un valor de mercado de 240 mil millones de euros y una reputación de ser un inversor minoritario paciente y solidario, LVMH puede prevalecer en última instancia.
“Creemos que LVMH probablemente sería el más interesado, de los tres, en una participación, si estuviera disponible, dado el ajuste estratégico”, dijeron analistas de Berenberg en una nota. Dijeron que el grupo podría permitirse fácilmente comprar Armani, que valoraron entre 5,000 y 7,000 millones de euros.
Reuters
