Después de la fiesta y la siesta, llega el malestar a Naolinco, tras celebrarse las fiestas de primavera ya se ventilan los sospechosos negocios del alcalde Luis Montero. 

Uno de los resultados con la llegada del presidente municipal morenista es la indignación entre los naolinqueños por el megaespectáculo carnavalesco. El dispendio del dinero público y la humillación a los ciudadanos es latente. Los ciudadanos reclaman otras necesidades y prioridades para la localidad, pero sobre todo para la población más vulnerable.

Abanderado por Morena -el movimiento político que pregona ‘no mentir, no robar y no traicionar’ – Luis Montero se apartó de la ‘pobreza franciscana’ que hoy acogen los seguidores de la denominada 4T. A decir de los informados, a la fiesta del pueblo las anteriores administraciones municipales destinaban casi 3 millones de pesos para el carnaval de Naolinco, sin embargo, en esta optaron por un espectáculo que costó más de 10 millones de pesos.

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La red de negocios en el ayuntamiento de Naolinco consiste en abrir ‘espacio’ a contratos a su primer círculo empresarial, familiar y de compadrazgo, lo que representaría apenas la punta del iceberg en las malolientes decisiones del primer edil y su equipo de trabajo.

Una de las preocupaciones de los pobladores de Naolinco es que año con año sufren con el suministro y la calidad de agua para el consumo doméstico, sin que la primera autoridad muestre empeño y dedicación para solucionar el problema, ya que está más alegre en sus fiestas continúas, lo que frena la eficacia y honradez que merece la presidencia municipal. 

El alcalde de Naolinco Luis Montero encabezó las fiestas de primavera.

“Para muestra un botón. El ‘Cerveza Fest’ sólo fue una borrachera local de los del Palacio. Dicen que un compadre del ingeniero Montero fue el que montó el show y de ahí los grupos que amenizaron terminaron en una fiesta privada del jefe” señalaron varios de los inconformes.

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Pero la irresponsabilidad y voracidad del alcalde Luis Montero ha ido a más. Durante el carnaval celebrado del 8 al 13 de junio de este año (en la que la famosa banda sinaloense La Adictiva fue el atractivo principal y cobra 2 millones de pesos por show, según su página oficial) familiares del edil obtuvieron la ‘exclusividad’ de los locales ambulantes donde se ofreció la cerveza, sin ninguna medida sanitaria ni de control hacia adultos, jóvenes y menores de edad.

Cansados de los abusos, la irresponsabilidad y el derroche de las arcas municipales, los naolinqueños acuden día con día al ayuntamiento para ser atendidos y escuchados por sus autoridades, pero cuando ven al alcalde este acapara el poder diciendo: “estoy protegido por la verdadera izquierda de Veracruz; el distinguido maestro Beto Flores y la senadora Gloria Sánchez, además Manuel Huerta es de aquí y nos debe algunas…”.

La ciudad de Naolinco es uno de los vestigios más importantes de la cultura Totonaca, denominada también la “Ciudad de los cuatro movimientos del sol”. En la actualidad la irresponsabilidad gubernamental gira alrededor de una falsa transformación municipal. Por ello, las autoridades fiscalizadoras no pueden quedarse apoltronadas frente a estos hechos y tendrán que vigilar e informar públicamente los movimientos al interior del palacio municipal. 

De la ficción a la realidad, desde el parque hasta el palacio municipal, pareciera que se está filmando otra vez aquella película protagonizada en los años 80’s por Michael Douglas, Kathleen Turner y Danny DeVito: “Dos bribones tras la esmeralda pérdida”.

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