Tras minimizar las críticas que hiciera la representación del Alto Comisionado de las Naciones Unidas sobre el caso de la juez Angélica Sánchez, la presidenta del Poder Judicial, Lisbeth Jiménez Aguirre reiteró que aún está vigente la orden de aprehensión.
Mencionó que son “subjetivas” las declaraciones de la juez, en el sentido de que fue víctima de abusos, y de igual modo le restó importancia a la postura del organismo internacional, al asegurar que dentro del Poder Judicial no existe violación a su autonomía.
“Que quede muy bien claro, una cosa es la subordinación y otra cosa es la coordinación. En el Poder Judicial trabajamos a favor de la sociedad para garantizar la gobernabilidad”, agregó.
Aseguró que hoy en día, todas las resoluciones de los jueces del Poder Judicial de Veracruz se sustentan en lo que sucede en las audiencias, y no se les dicta ningún tipo de línea.
Si a alguna de las partes, no les resulta favorable las resoluciones emitidas, siempre pueden acudir a otras instancias para buscar la modificación o revocación de las sentencias.
En ese sentido, dijo, que los amparos emitidos por los jueces federales ya han variado un poco, luego de la queja que hicieron pública, en la cual otorgaban liberaciones a responsbles de delitos graves como secuestro, violación y homicidio.
Comentó, que si bien, la Convención Interamericana de los Derechos Humanos, ha hecho notar la violación de las garantías en la emisión de la prisión oficiosa, de igual forma avala cuando sea una prisión justificada y ésta se logre probar.
Lisbeth Jiménez Aguirre indicó que la queja presentada en ese momento, era, porque los jueces federales resolvían que no se podía conceder la prisión, ya sea justificada o la oficiosa.
A partir de manifestar su inconformidad, reconoció que ahora los jueces federales están permitiendo se aplique la prisión justificada, cuando ésta se logra demostrar plenanemente su necesidad dentro del desarrollo de las audiencias.
