El piloto mexicano Sergio Pérez (Red Bull) afirmó que “las cosas están muy bien” con su equipo tras “hablar de ello” después de que este venciera en el Gran Premio de Arabia Saudí en Yeda, pero el punto extra de la vuelta rápida se lo quedase su compañero de equipo, el neerlandés Max Verstappen, tras marcar el mejor tiempo en la última vuelta, lo que le permite liderar el mundial de pilotos de F1.
“Las cosas están muy bien, creo que hablamos de ello y todos estamos en la misma línea, obviamente aprendemos de ello. En su momento pensé que no se me había dado la información correcta, pero ahora, mirándolo en retrospectiva, todo estuvo bien”, comentó en la rueda de prensa previa al Gran Premio de Australia, tercera cita del calendario de F1.
“La comunicación que tuve con mi ingeniero fue, probablemente, malinterpretada. Me arrepiento de no haber ido a por la vuelta rápida, porque pensaba que ese era el caso”, comentó en cuanto a las indicaciones de Red Bull a sus dos equipos.
El equipo austriaco ha sido el gran dominador del inicio de temporada, con dos dobletes en las dos primeras carreras del 2023.
“Esperamos mantener el impulso, para el equipo han sido dos primeras carreras fantásticas, pero queda mucho camino por delante, cada fin de semana es un nuevo reto”, declaró.
“Baréin y Arabia Saudí son circuitos muy diferentes entre sí, y Australia será otro reto para nosotros y para este coche. Tenemos un gran ritmo y estamos trabajando muy duro juntos para asegurarnos de que nuestra fiabilidad también esté ahí. Ha sido un comienzo divertido para 2023, pero eso no importará si no mantenemos nuestro alto nivel”, añadió.
“Me siento bien, pero cada fin de semana es un nuevo reto, así que estoy deseando afrontar este nuevo desafío”, completó.