Apple ha bloqueado el uso de herramientas de inteligencia artificial para algunos de sus empleados, con lo que se convirtió en la última empresa importante en restringir el uso de plataformas de inteligencia artificial generativa en el trabajo, en medio de la preocupación de que los empleados puedan filtrar datos internos confidenciales.
Según el diario The Wall Street Journal, Apple prohibió a sus empleados usar ChatGPT y otros servicios impulsados por IA, como Copilot de Github, que ayuda a los desarrolladores a escribir código.
La prohibición surge de las preocupaciones sobre las prácticas de manejo de datos de estas plataformas de IA, que son propiedad o están respaldadas financieramente por el rival de Apple, Microsoft, ya que podría comprometer el código propietario de Apple u otros datos confidenciales, agrega el informe.
El fabricante rival de teléfonos inteligentes, Samsung, implementó una prohibición similar en ChatGPT y otras herramientas de IA a principios de este mes, luego de descubrir una fuga accidental de código confidencial por parte de un ingeniero que lo subió a ChatGPT.
En enero, Amazon prohibió a los empleados compartir cualquier código o información confidencial con el chatbot de OpenAI después de afirmar que descubrió ejemplos de respuestas de ChatGPT que se parecían a datos internos de Amazon.
En febrero, JPMorgan Chase restringió severamente el uso interno de ChatGPT para evitar posibles problemas normativos relacionados con el intercambio de información financiera confidencial con una plataforma de terceros.
Desde entonces, otros bancos como Bank of America, Citigroup, Deutsche Bank, Wells Fargo y Goldman Sachs han seguido su ejemplo, prohibiendo el uso de chatbots de IA por parte del personal.
La mayoría de las empresas que prohíben el uso de herramientas de inteligencia artificial de terceros están preocupadas por la forma en que servicios como ChatGPT y Bard de Google almacenan los datos compartidos con ellos en los servidores.
La otra complicación se deriva del hecho de que la mayoría de los chatbots y los servicios de inteligencia artificial dependen de las entradas de los usuarios para entrenar sus modelos y pueden proporcionar accidentalmente a otros usuarios los datos de propiedad de una empresa sin siquiera darse cuenta.
Si bien ChatGPT ofrece a los usuarios una forma de deshabilitar el guardado de historiales de chat, no está activado de forma predeterminada. Tampoco está claro si eliminar un chat tiene algún impacto si un servicio ya ha utilizado la conversación para entrenar sus modelos.
En marzo, OpenAI tuvo que cerrar brevemente ChatGPT para resolver un error que permitía a algunos usuarios ver partes del historial de chat de otro usuario.
En sentido contrario: otros sí integran la inteligencia artificial
A pesar de que algunas empresas restringen el uso de servicios de IA en el trabajo, otras ya han comenzado a agregar estas herramientas a su flujo de trabajo.
Goldman Sachs, uno de los bancos que limita el uso de ChatGPT por parte de los empleados, reveló que estaba usando herramientas de inteligencia artificial generativa para ayudar a sus desarrolladores de software a escribir y probar el código.
La firma de consultoría de gestión Bain & Company anunció a principios de este año que estaba integrando las herramientas generativas de OpenAI en sus sistemas de gestión. Otros han expresado optimismo acerca de aprovechar el poder de la IA, diciendo que creen que puede reemplazar una parte significativa de su fuerza laboral humana.
Ayer, la compañía BT dijo que planea reemplazar al menos a 10,000 trabajadores, en su mayoría personas con funciones de servicio al cliente y administración de redes, con herramientas impulsadas por IA durante la próxima década.
A principios de este mes, el CEO de IBM, Arvind Krishna, dijo que la compañía dejará de contratar humanos para trabajos que la IA pueda realizar.
Qué observar
Vale la pena señalar que estas prohibiciones de herramientas de IA por parte de algunas empresas no se derivan necesariamente de preocupaciones más amplias sobre la inteligencia artificial en sí, sino más bien de cómo los titulares de plataformas de IA de terceros como OpenAI, Google y Microsoft manejarán los datos propietarios compartidos en estos servicios.
El informe del Journal señala que Apple está trabajando en sus propias herramientas de IA, dirigidas por el exempleado de Google, John Giannandrea.
Tras el reporte financiero más reciente de Apple, el CEO de la compañía, Tim Cook, dijo que pensaba que “es muy importante ser deliberado y reflexivo en la forma en que aborda estas cosas… pero el potencial es ciertamente muy interesante”.
