El sudor que genera el calor del verano puede ocasionar diferentes reacciones en la piel, la dermatitis irritativa es la más común y cursa con picor y eccemas. Puede ocurrir a cualquier persona pero son más propensas las que tienen pieles atópicas, más sensibles.

“Alergia al sudor en la piel como tal no existe, nadie genera una reacción inmunológica contra su propio sudor”, explica a EFEsalud el dermatólogo de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), Antonio Clemente.

Pero sí hay determinadas condiciones de la piel que se pueden desencadenar o agravadas por la sudoración. Entre ellas destacan:

Dermatitis o eccema irritativo

Es la afección de la piel más común ocasionada por el sudor. Pero también influyen otros factores como la humedad o el roce de la ropa y el tipo de tejido, en especial los sintéticos.

Es muy habitual que se produzca en zonas del cuerpo como las que rozan con el sujetador en las mujeres o en las ingles por el contacto con las prendas interiores. También aparece en las axilas o en las zonas interiores de los muslos

Las lesiones de las dermatitis irritativas son superficiales y cursan con enrojecimiento, sarpullido, descamación, picor e, incluso, con escozor.

Este roce con sudor también se puede producir en invierno, según las condiciones, pero es mucho más habitual con el calor del verano.

Miliaria

La miliaria es otro cuadro de lesiones en la piel que se produce en bebés, y rara vez en adultos, y se conoce comúnmente como sudamina.

En este caso el sudor obstruye los conductos de las glándulas sudoríparas y como consecuencia hay una retención de este líquido, lo que provoca un proceso inflamatorio en forma de granitos o sarpullido con picazón, explica el médico.

En el caso de los bebés, la erupción se manifiesta, principalmente, en el cuello, los hombros y el pecho. También puede producirse en las axilas, en el pliegue interno del codo y en la ingle.

Urticaria colinérgica

Es una reacción que aparece en la piel que puede ser agravada por el sudor que genera, por ejemplo, la práctica de deporte o el exceso de sudoración, indica el especialista.

Es habitual que se presente como habones en la piel.

La urticaria colinérgica es una enfermedad dermatológica poco frecuente.

¿Y si se infectan estas lesiones provocadas por el sudor en la piel?

Cuando el sudor maltrata nuestra piel y nos provoca estas lesiones hay que tener precaución porque se pueden infectar, especialmente en los pliegues de la dermis, como debajo del pecho de las mujeres, en las axilas o en las inglés donde hay roce y humedad.

Pueden aparecer los llamados intertrigos, una lesión que puede cursar con infección por hongos o bacterias en los pliegues de la piel.

Otra infección frecuente es la foliculitis que se genera en el poro piloso, donde nace el pelo. Son infecciones bacterianas favorecidas por el exceso de sudoración en verano, pero también se puede producir en otras épocas del año si hay sudor.

¿Cómo se tratan las dermatitis?

La mayoría de las lesiones en la piel causadas por el sudor y el roce necesitan un tratamiento dermatológico, especialmente si cursan con infección bacteriana o por hongos.

Ya que no se debe a una reacción alérgica, el dermatólogo advierte de la no conveniencia de aplicarse cremas antihistamínicas tópicas “ya que producen reacciones de fotosensibilidad en la piel”, sobre todo si las utilizamos en verano, cuando estamos más expuestos al sol.

Sí es apropiado las cremas con corticoides contra la inflamación que presentan estas dermatitis.

En el caso de infección, habría que aplicar una crema antifúngica en caso de hongos o antibiótica si el origen es bacteriano.

En cualquier caso, según el dermatólogo, es necesario acudir a consulta para poder dar un diagnóstico y un tratamiento específico y, especialmente, si estas lesiones persisten y no desaparecen de forma más o menos rápida.

Cinco consejos para prevenir que el sudor maltrate la piel

En verano, en muchas ocasiones, el sudor es complicado de evitar y, en realidad, se trata de una función esencial que ayuda al cuerpo a regular la temperatura.

El dermatólogo Antonio Clemente propone algunas pautas que ayudan a que el sudor no afecte a nuestra piel:

  • Utilizar ropa fresca y aireada, mejor con tejidos naturales y de algodón cien por cien.
  • Evitar la humedad persistente en la piel. No cambiarnos el bañador mojado es una de las causas de lesión e infección.
  • Mantener las zonas de pliegues de la piel lo más secas posible, retirando el sudor de vez en cuando con un pañuelo.
  • Las duchas, tanto frías como templadas, ayudan a aliviar el escozor y el picor.
  • Las cremas hidratantes también calman la piel pero hay que evitar que lleven perfumes y otros ingredientes que irriten porque podrían empeoran el eccema.

“A mis pacientes les digo que las dermatitis no se quitan a base de cremas hidratantes, sino con un tratamiento dermatológico”, concluye el dermatólogo de la AEDV.

Publicidad