En poco tiempo vivimos uno de los eventos más impactantes en cuestión astronómica y geomagnética, cuando fuimos impactados por la radiación de la pasada tormenta solar, y por si fuera poco, los expertos ya tienen la fecha de la próxima.

Según las previsiones de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) actualmente nos encontramos camino al máximo de actividad solar; afirma Mar Gómez, física y Responsable de Meteorología de Eltiempo.es.

“No obstante, según las previsiones el máximo está en camino y esto significa que tendremos mucha más actividad solar con más tormentas geomagnéticas y posibles apagones de radio y auroras polares en latitudes más bajas próximamente”, señaló.

¿Cuándo es la próxima tormenta geomagnética?

De acuerdo con diversos expertos, entre el 2024 y el 2028, podríamos vivir otra tormenta solar extrema, la cual, dejaría incomunicado al planeta por semanas o incluso, hasta meses.

¿Qué son las tormentas geomagnéticas?

Las tormentas geomagnéticas, también conocidas como tormentas solares, son perturbaciones en el campo magnético de la Tierra causadas por la actividad solar. Estas fascinantes danzas cósmicas pueden tener efectos tanto maravillosos como disruptivos en nuestro planeta.

Las fuertes tormentas geomagnéticas, como la que provocó las auroras, pueden inducir corrientes eléctricas en la Tierra, lo que podría dañar o sobrecargar las redes eléctricas, provocando apagones y otros problemas.

Sobre la pasada tormenta solar

La potente tormenta solar que produjo auroras en latitudes inusualmente bajas el pasado 11 de mayo, también alteró el funcionamiento de brújulas en las profundidades del océano.

Los observatorios submarinos de la ONC (Ocean Networks Canada) en las costas oeste y este de Canadá registraron la distorsión temporal del campo magnético de la Tierra en plataformas de instrumentos desplegadas a una profundidad de hasta 2,7 kilómetros bajo la superficie del océano, potencialmente algunas de los registros más remotas jamás capturados.

El cambio magnético más significativo movió la dirección de la brújula dentro de un rango de +30 a -30 grados y se registró a una profundidad de 25 metros en el sitio submarino Folger Passage, que es parte del observatorio cableado ONC NEPTUNE frente a la costa de Isla de Vancouver.

La directora interina de la Oficina de Análisis del Clima Espacial Luna a Marte (M2M) de la NASA, Teresa Nieves-Chinchilla, aseguró que el evento se estudiara por años, pues ayudará a probar los límites de sus modelos y la comprensión de las tormentas solares.

Explica que los primeros signos de la tormenta se comenzaron a registrar a última hora del 7 de mayo, cuando se dieron dos fuertes erupciones solares. Del 7 al 11 de mayo, múltiples erupciones solares fuertes y al menos siete CME se precipitaron hacia la Tierra.

Publicidad