La guía “Más allá del espejo”, elaborada por una alianza de profesionales en colaboración con Pfizer, es un documento que aborda las necesidades menos cubiertas en consulta de las pacientes con cáncer de mama, desde aspectos dermatológicos o de nutrición, hasta los relativos a la salud bucodental.
En ocasiones, algunas personas que conviven con un cáncer de mama o cáncer de mama metastásico no ven resueltas sus dudas sobre ciertos aspectos concretos de la vida que se van a ver alterados por la enfermedad. Muchas veces se trata de temas de la vida cotidiana como la capacidad o no de realizar ejercicio físico, las relaciones sexuales o qué dieta es recomendable seguir.
Así, un conjunto de profesionales en colaboración con Pfizer ha lanzado la guía “Más allá del espejo”. En ella se pone de manifiesto la importancia de los cuidados en las distintas etapas de la enfermedad y va dirigida tanto a profesionales del ámbito sanitario como a pacientes.
Su objetivo principal es facilitar un abordaje íntegro de la patología que permita cubrir las necesidades de los pacientes. Se pretende con ello derribar miedos y estigmas gracias a la información rigurosa y accesible que se recoge en este manual.
Alianza de profesionales
Para su elaboración se han unido distintos expertos procedentes de diferentes zonas geográficas. Estos especialistas han tomado como referencia las expectativas y cuestiones más habituales que plantean las pacientes en la consulta relativas a cuidados dermatológicos, nutricionales, estéticos o ginecológicos.
La guía “Más allá del espejo” se encuentra disponible online en cancerdemamametastasico.es. Cuenta con el respaldo de la evidencia científica, el conocimiento y la experiencia clínica de oncólogos y profesionales de especialidades como ginecología, dermatología, fisioterapia o cirugía maxilofacial y estética.
Según la doctora Virginia Martínez, oncóloga médica en el Hospital Universitario La Paz y autora: “Toda la información, los consejos y recomendaciones que recoge esta guía buscan cubrir esas necesidades de cuidados que estaban desatendidas hasta ahora, porque las pacientes, además de pacientes, son mujeres que no quieren renunciar a seguir viéndose y sintiéndose bien durante todo el proceso de su enfermedad y nosotros, como profesionales médicos, tenemos que acompañarlas para brindarles la máxima calidad de vida posible (…)“.
“Más allá del espejo”
La guía presenta un índice muy completo, ya que abarca todos los aspectos de la vida de los pacientes.
Así, encontramos desde aspectos que abordan la dieta y el estilo de vida de las pacientes hasta temas de dermoestética o de cirugía maxilofacial.
Dieta y estilo de vida
La dieta y el estilo de vida es uno de los apartados con mayor repercusión, ya que afecta a la totalidad de las personas que padecen la enfermedad. En la guía, los expertos sanitarios afirman: “La forma en que vivimos, comemos, dormimos, nos movemos, trabajamos, pasamos el tiempo libre, manejamos el estrés y nos enfrentamos a los desafíos de la vida, ha demostrado en multitud de estudios científicos que posee un profundo efecto sobre nuestra salud, incluyendo el desarrollo de enfermedades como el cáncer”.
Los profesionales médicos recomiendan la dieta mediterránea tanto para personas que no padecen la enfermedad como para pacientes. Recuerdan que la dieta mediterránea se caracteriza por un consumo mayoritario de alimentos de origen vegetal, la presencia de grasas de alta calidad, el consumo moderado de lácteos y huevos y el bajo consumo de carne.
¿Qué debemos hacer para llevar a cabo una dieta mediterránea?
- Usar el aceite de oliva como principal grasa de adición. Es un alimento rico en vitamina E, betacarotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le confieren propiedades cardioprotectoras.
- Consumir alimentos de origen vegetal en abundancia: frutas, verduras, legumbres, champiñones y frutos secos. Se recomienda consumir cinco piezas de frutas y verduras a lo largo del día. Tienen un alto contenido en antioxidantes y fibra, que pueden ayudar a prevenir algunos tipos de cáncer.
- Añadir alimentos procedentes de cereales integrales a nuestra dieta. Si cambiamos el arroz blanco por el integral, por ejemplo, tendremos un afecto más moderado en el azúcar y la insulina.
- Priorizar los alimentos frescos y de temporada. Es el mejor momento para obtener los nutrientes de las frutas y verduras y disfrutar de su sabor.
- Consumo moderado de productos lácteos. Los lácteos son nutricionalmente una gran fuente de proteínas de alto valor biológico, minerales y vitaminas.
- Priorizar la carne blanca a la carne roja. Es preferible el consumo de pollo o pavo frente al de ternera y cerdo, además de no superar las dos veces por semana.
- Consumir tres veces por semana pescado, sobre todo pescado azul pequeño.
- Tomar tres o cuatro huevos a la semana. Contienen proteínas de muy buena calidad y pueden resultar una alternativa a la carne o al pescado.
Problemas ginecológicos
Otro de los aspectos más comunes en las pacientes con cáncer de mama son los problemas ginecológicos. En “Más allá del espejo”, los expertos ponen en valor los más comunes, abordan los signos de alerta y explican cómo afectan en concreto a las pacientes de cáncer.
SGM: qué es y cómo afecta
El SGM es el síndrome genitouritario de la menopausia, y se define como los signos y síntomas asociados a la disminución de hormonas sexuales como estrógenos o andrógenos en la menopausia. Esto causa cambios anatómicos, fisiológicos y funcionales en el área vulvovaginal y en el tracto urinario de las mujeres.
Lo cierto es que estos síntomas disminuyen la calidad de vida de las mujeres y cuentan con un impacto negativo similar al que pueda tener el asma o la artritis. El SGM afecta, según la guía, a un 50-75 % de las pacientes con cáncer de mama y se asocia a la menopausia ocasionada por los tratamientos hormonales asociados a la enfermedad.
Los doctores recomiendan algunas pautas para tratar de mantener una buena salud genitourinaria como seguir una dieta saludable y tratar de evitar el sobrepeso o practicar ejercicio moderado con regularidad.