En un contexto donde el maltrato sigue presente en la vida cotidiana —desde agresiones verbales hasta situaciones de abuso emocional o físico—, identificar estos comportamientos y aprender a responder de manera saludable se vuelve fundamental para preservar el bienestar psicológico. El psiquiatra y psicoterapeuta francés Christophe Massin ofrece una guía clara para comprender por qué algunas personas enfrentan las agresiones mientras que otras permanecen pasivas ante ellas.
Claves para proteger tu bienestar emocional
La “inmunidad psicológica”: una defensa emocional clave
Massin, especialista con más de tres décadas de práctica clínica, explica que así como el cuerpo necesita defensas para combatir infecciones, la mente también requiere mecanismos internos para protegerse del maltrato. “El sufrimiento que causa el abuso puede fomentar trastornos físicos y mentales, depresión o incluso una espiral de violencia doméstica”, advierte el experto.
Su investigación revela que muchas personas presentan deficiencias en esta “inmunidad psicológica”, lo que las lleva a tolerar situaciones dañinas, autoculparse y desarrollar sentimientos profundos de impotencia.
1. Reconocer que existe una ofensa
El primer paso para enfrentar el maltrato es identificarlo. Massin describe a quienes tienen una inmunidad psicológica debilitada como personas que “no parecen darse cuenta de que alguien les habla mal y les falta el respeto”. Cuando la agresión se normaliza, surge la ceguera emocional: “Si alguien señala el maltrato, lo trivializará, dirá que no es grave o que está acostumbrada”, explica.
2. Romper con la pasividad automática
Estas personas suelen asumir cargas excesivas, justificar exigencias injustas o minimizar su propio malestar. Para cambiar esta dinámica, Massin recomienda preguntarse: ¿Esto realmente me conviene? Reconocer los propios límites es esencial para comenzar a protegerse.
3. Aplazar la respuesta
Ante una exigencia injusta, detenerse unos segundos puede marcar la diferencia. “Quiero tenerme en cuenta, nada se decidirá sin consultarme a mí mismo”, propone Massin como ejercicio mental para salir del automatismo que fomenta el maltrato.
4. Restaurar la inmunidad psicológica
Según Massin, muchas personas repiten patrones aprendidos en la infancia y se colocan, sin querer, en escenarios similares a los traumáticos. Para romper con esta cadena, es necesario ensayar desacuerdos, límites y expresiones de enojo saludable en entornos seguros.
5. Entender que los juicios no son verdades
La agresión verbal suele manifestarse como juicios que, en realidad, “no son verdades, sino opiniones”. El especialista aconseja no quedarse en el contenido de estas críticas, sino reconocer su intención agresiva y desactivarlas quitándoles atención.
Proteger la salud emocional es un acto de autocuidado
Desarrollar la “inmunidad psicológica” no implica volverse agresivo, sino aprender a defenderse del maltrato de manera consciente y sana. Con prácticas constantes, señala Massin, es posible liberarse de patrones destructivos y fortalecer el bienestar emocional individual y colectivo. En este camino, reconocer, nombrar y enfrentar el maltrato es el primer paso para construir relaciones más respetuosas y equilibradas.










