La cuenca del Polo Sur-Aitken (SPA), el cráter de impacto más antiguo y extenso conocido en la superficie lunar se formó hace 4,250 millones de años, según revelan los resultados de un nuevo análisis geológico.
Estos hallazgos se basan en las muestras de roca recolectadas por la misión china Chang’e-6, publicadas recientemente en la revista National Science Review por un equipo dirigido por el profesor Chen Yi, del Instituto de Geología y Geofísica de la Academia China de Ciencias.
Este descubrimiento proporciona evidencia directa sobre la edad de la cuenca, lo que permitirá refinar la cronología de la formación lunar y comprender mejor la historia temprana del sistema solar.
La misión Chang’e-6: claves para resolver un misterio lunar
La cuenca SPA, ubicada en la cara oculta de la Luna, es una enorme estructura de impacto que surgió durante un período de intenso bombardeo de asteroides, el cual moldeó gran parte del sistema solar en sus primeros millones de años. Sin embargo, hasta ahora, la edad exacta de la cuenca permanecía incierta debido a la falta de muestras directas.
El regreso de las rocas lunares por parte de la Chang’e-6 ofreció a los científicos la oportunidad única de analizar directamente los materiales derivados de este cráter. Gracias a esto, los investigadores lograron fechar con precisión su formación.
Análisis de las rocas: pruebas de dos eventos de impacto
El equipo de científicos examinó alrededor de 1,600 fragmentos de dos muestras de suelo lunar recogidas por la misión. Durante el análisis, identificaron 20 clastos de norita (rocas ígneas) con texturas, composición mineralógica y características geoquímicas asociadas a un origen por impacto.
Utilizando la técnica de datación plomo-plomo en los minerales con circonio presentes en estos fragmentos, los investigadores descubrieron evidencia de dos eventos de impacto distintos:
- Hace 4,250 millones de años: Formación de la cuenca SPA.
- Hace 3,870 millones de años: Otro evento de impacto posterior.
Las rocas más antiguas, fechadas en 4,250 millones de años, presentaron rasgos estructurales que indican que cristalizaron a distintas profundidades dentro de una lámina de fusión generada por el impacto principal.
“El impacto de SPA generó una enorme capa de fusión por impacto. Para determinar con precisión la edad de la cuenca, primero necesitábamos identificar los productos de esta fusión en las muestras de Chang’e-6”, explicó el profesor Chen Yi.
Según los científicos, estos hallazgos no solo amplían nuestra comprensión de la historia lunar, sino que también arrojan luz sobre los procesos dinámicos que moldearon el sistema solar primitivo.