El gobernador Cuitláhuac García Jiménez admitió que “no hay para cuándo” se realice la obra para mejorar la infraestructura hidráulica para dar cauce a los anegamientos generados en la carretera Banderilla-Xalapa.
El morenista justificó que ya se inició con un proyecto pero que “tardará varios años”, aunque prometió iniciar las obras antes de dejar el puesto.
Como consecuencia, admitió que tampoco se realizará la pavimentación con cemento hidráulico en la carretera Banderilla-Xalapa.
Señaló que si realizaran la obra de pavimentación, posteriormente tendrían que romperla para lograr darle cauce al agua de lluvia, que en esa zona llega a acumular hasta 30 metros cúbicos.
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“Cuando ese proyecto ejecutivo nos diga que podemos pavimentar con cemento hidráulico ya, lo vamos a hacer, pero nos va a llevar un par de año, pero tenemos que hacerlo, pero lo vamos a empezar antes de que me vaya”.
Aseguró que el colector pluvial actual llega a absorber 6.9 metros cúbicos por segundo, lo cual hace que se vuelva muy lento el desalojo de agua al convertirse “en un cuello de botella” y que por ello es necesario desviar el agua hacia otra micro cuenca hidrológica.
“Tenemos que ir más arriba para tratar de que esa agua vaya a otras micro cuencas hidrológicas que hay, pero se necesita un trabajo mayor, eso nos va a impedir la primera etapa de pavimentación con cemento hidráulico que queríamos hacer entre el Cetis y el semáforo, porque no queremos hacerlo y después romperlo”.
Así justificó que por ahora la carretera sólo la va na bachear “porque está muy mal la carretera, pero es una reparación momentánea”.
