El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reafirmó este lunes la voluntad de su gobierno para mantener diálogos con Estados Unidos que conduzcan a un acercamiento entre ambos países, pero sobre la base de la “igualdad de condiciones”.

“Estamos planteando la voluntad, para con todo el respeto y con toda la capacidad de estar en igualdad de condiciones, poder tener diálogos que vayan acercando a ambos países”, declaró el mandatario durante la inauguración de la Feria Internacional de La Habana (Fihav).

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Díaz-Canel dijo que desde hace tiempo “ha habido luces” para que existan relaciones comerciales entre las dos naciones, que en las últimas seis décadas han mantenido un tenso conflicto y que logró una pausa en el periodo conocido como “deshielo” entre 2015 y 2018.

“Nosotros nunca hemos puesto una barrera con eso. Ha sido el bloqueo (embargo económico) que ha puesto las barreras”, señaló el mandatario.

Asimismo, apuntó que Cuba lleva tiempo “insistiendo en que está abierta la inversión extranjera también para las empresas norteamericanas y para los cubanoamericanos”.

Pero consideró que, aunque exista voluntad, “el bloqueo y las restricciones del bloqueo impiden muchas de estas negociaciones”, tanto a la parte norteamericana como de la cubana, e incluso que “empresas de otros países puedan participar”.

Además, dijo que “se avanzó bastante, se están dando pasos” durante las conversaciones sobre el tema migratorio realizadas por funcionarios de las dos naciones la semana anterior en La Habana.

El gobierno de Estados Unidos ha adoptado varias medidas en los últimos meses para avanzar en la normalización de la cuestión migratoria, como el incremento paulatino de sus servicios consulares en la isla, el restablecimiento de un programa de reunificación familiar, suspendido desde 2017, la reanudación de vuelos comerciales y la autorización de los viajes educativos y profesionales.

Cuba atraviesa una grave crisis económica por la combinación de la pandemia, el endurecimiento de las sanciones estadounidenses y los errores internos en la gestión macroeconómica.

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