Debido a la importancia del tema para México y por tratarse de un senador de Veracruz, la columna Política zoom, del respetado periodista Ricardo Raphael, se reproduce íntegramente en este espacio. La información y análisis de este analista político se publica en el Diario Milenio los lunes, jueves y sábado. He aquí la información que brinda este día.

“La reunión se celebró el viernes pasado al mediodía. Asistieron Adán Augusto López, líder de la bancada de Morena; Miguel Ángel Yunes Márquez, senador propietario del PAN, y Miguel Ángel Yunes Linares, ex gobernador de Veracruz y senador suplente de ese mismo partido.

Ahí acordaron que el senador Yunes Márquez pedirá licencia para que su padre asuma el cargo el día en que se votará la reforma judicial. Luego, el ex gobernador de Veracruz, Yunes Linares, se pronunciará a favor de la mayoría. Él será el traidor que hacía falta para fracturar al bloque opositor.

A cambio de esta defección, Adán Augusto ofreció hacer que desaparezcan las varias órdenes de aprehensión enderezadas contra la familia Yunes. La más complicada es la que pesa contra Fernando Yunes, hermano del senador e hijo del ex gobernador, quien ha sido acusado de presunto daño patrimonial cometido durante su gestión como presidente municipal del puerto de Veracruz.

También fueron objeto de negociación las órdenes giradas contra Yunes padre por delincuencia organizada y enriquecimiento ilícito. La primera se basa en las acusaciones realizadas por la periodista Lydia Cacho a propósito de su presunta participación en una red de pederastia y trata de personas. Existe otra denuncia por supuesto peculado, ocurrido cuando el ex gobernador fuera director del Issste.

Aunque tiene fuero, el senador Miguel Ángel Yunes Márquez también ha sufrido persecución judicial; en su caso por un pretendido uso de documentación falsa, por mentir a la autoridad y por fraude procesal.

Adán Augusto López prometió que tres de estas órdenes desaparecerían antes de que el senador solicite licencia y las otras después de la votación programada para este próximo miércoles.

Hay un acuerdo más que tiene muy enojada a la gobernadora electa Rocío Nahle: en la misma reunión, Adán Augusto se comprometió a respetar el dominio político de la familia Yunes sobre los municipios de Veracruz y Boca del Río, donde el PVEM serviría como vehículo para promover las futuras candidaturas políticas propuestas por el clan.

Poco importa este último acuerdo porque esta semana el apellido Yunes quedará labrado en la oscura piedra de la historia mexicana que colecciona los nombres de los traidores; el peor de todos, el del senador Yunes Márquez, quien no supo decirle que no a su truculento padre.

Zoom: Para eso quieren el control del Poder Judicial, para someter a quien se les oponga.

Publicidad