Los dibujos, acuarelas, esculturas en pequeño formato, fotopinturas, cartas y objetos intervenidos que realizó el artista plástico Francisco Toledo (1940-2019) acerca de su amistad con el escritor Carlos Monsiváis (1938-2010) se mostraron en la exposición Toledo-Monsiváis.
La exhibición se presentó hasta ayer domingo en el Centro Cultural Tijuana, de la Secretaría de Cultura, y representó la complicidad entre ambos artistas, quienes colaboraron en diversos proyectos.
Fueron 68 obras, entre dibujos a tinta china, punta seca, gouche y agua tinta, acuarelas, fotoesculturas, fotopinturas, objetos intervenidos y cuadernos “en las que se observó la veta imaginativa de Toledo que lo llevó a realizar series enfocadas en las tradiciones populares, la cultura indígena del Istmo de Tehuantepec, la crítica a la política y la desmitificación de héroes nacionales”.
Carlos Monsiváis y Francisco Toledo son dos de los creadores más notables del siglo XX y principios del XXI de nuestro país.
De Monsiváis, la dependencia destaca que es un autor prolífico de los temas más diversos de la historia cultural de México, de la realidad nacional que, con mirada aguda, inteligente y perspicaz mostraba una imagen que pocos podían visualizar acerca de la realidad nacional.
Además de su creatividad, ambos artistas mexicanos se caracterizaban por su posición de luchadores sociales.
“Ambos, juntos o por separado, a lo largo de décadas, combatieron por las mejores causas de nuestro país, comprometiéndose con muy diversos grupos sociales minoritarios o no, pero siempre en busca de la justicia social, del enfrentamiento con la inequidad, del abuso y del autoritarismo”, destacó.
Los organizadores de la exposición resaltaron la influencia de uno sobre otro, por lo que en la exposición Toledo-Monsiváis, que estuvo abierta al público desde junio pasado, sobresalió la materialización de ese vínculo y amistad.