Con motivo del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra este martes, 14 de noviembre, la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), promovida por la Agencia EFE y la RAE, recopila las siguientes claves para mejorar la redacción de las informaciones relacionadas con esta enfermedad metabólica crónica.
1. “Diabetes”, sin tilde. El término “diabetes” es una palabra llana y terminada en ese, por lo cual se escribe sin tilde. Según el “Diccionario panhispánico de dudas”, se desaconseja la acentuación esdrújula (“diábetes”), que se oye en ocasiones en algunos países, y otras formas como “diabetis”.
2. La denominación “diabetes ‘mellitus’”, con minúscula. “Diabetes” es la forma abreviada del nombre completo de la enfermedad, “diabetes ‘mellitus’”, escrita así, en minúsculas, como los nombres de todas las enfermedades, con “mellitus” con doble ele y en cursiva (o entre comillas si no se dispone de este tipo de letra, por ser el nombre latino: “La diabetes ‘mellitus’ es un problema de salud pública a escala mundial”.
3. “Prediabetes”, en una palabra. El prefijo “pre-”, que se utiliza en la formación de nombres y adjetivos, se escribe unido a la palabra a la que acompaña, sin espacio ni guion intermedios: “prediabetes”, y no “pre diabetes” ni “pre-diabetes”.
4. “Insulinodependiente”, término válido. El “Diccionario de la lengua española” recoge el adjetivo “insulinodependiente” con el significado de ‘que precisa de la administración de insulina’ y señala que también es posible usarlo como sustantivo aplicado a personas: “un/una insulinodependiente”. Por su parte, el “Diccionario de términos médicos”, de la Real Academia Nacional de Medicina de España, advierte que es incorrecta la forma “insulín-dependiente”.
5. “Células madre”, plural recomendado. En las noticias relacionadas con las investigaciones para mejorar la vida de los pacientes es común el uso de la construcción “células madre”. En este caso, al igual que ocurre con otros sustantivos en aposición, lo habitual es mantener “madre” invariable en plural (y no emplear “células madres”).
6. “Azúcar”, válido en masculino y en femenino “Azúcar” es un sustantivo ambiguo, es decir, se puede emplear como masculino o femenino: “el azúcar”, “la azúcar”. Si no lo acompaña ningún adjetivo, es mayoritario el empleo del masculino, mientras que si lleva un adjetivo predomina el femenino. En plural, lleve o no adjetivo, prevalece el empleo en masculino. Otra singularidad del término “azúcar” es que, sin empezar por “a” tónica, acepta el uso del artículo “el” combinado con un adjetivo femenino: “Los carbohidratos, principalmente la azúcar refinada, reducen la actividad del cerebro”.
La FundéuRAE (www.fundeu.es), promovida por la Agencia EFE y la Real Academia Española (RAE), tiene como principal objetivo el buen uso del español en los medios de comunicación.