Patti Smith es más que una cantante, es una artista íntegra y su laureada carrera, marcada por la exploración y por las transgresiones, así lo refleja. Sin embargo, la estadounidense asegura que el hilo que une todas sus facetas es la poesía, que la lleva de una meseta a otra.

“La poesía ha sido un hilo que me ha llevado de una meseta a la siguiente, y cuando digo poesía lo hago en un sentido más general. Para mí, mi escritura, aunque sea en prosa o improvisada, tiene elementos de poesía”, dice en una entrevista telefónica con EFE a propósito de su próxima visita a Bogotá.

La artista estadounidense, de 76 años, (Chicago, 30 de diciembre de 1946 ), cuenta que desde pequeña le encantaba la poesía y empezó a escribir poemas en la adolescencia.

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“No era música y nunca pensé en grabar, venía de una familia pobre. Así que no tuve muchas oportunidades, no fui a una gran universidad, no tenía dinero para viajar, pero la poesía me llevó a actuar, lo que evolucionó hasta escribir canciones y grabar mi primer álbum, ‘Horses’ (1975), lo que me llevó de gira, lo que me llevó a ver mundo y finalmente me llevó a Soundwalk (Collective) y ahora a Bogotá”, afirma.

ESTRENO MUNDIAL EN BOGOTÁ

En la capital colombiana, Smith hará dos performances el 25 y 26 de julio en el Teatro Colón de la mano de Soundwall Collective, plataforma artística con la que hará la instalación multicanal “Correspondences”, que estará abierta al público hasta el 4 de octubre en la sala Fanny Mikey del Centro Nacional de las Artes.

Esta será la primera visita de la norteamericana a la capital colombiana, donde estará emocionada de conocer a la gente a través “del arte, la poesía y la comunicación”.

Sus dos performances, en las que interpretará algunas piezas con músicos del Soundwall Collective, “están muy basadas en la poesía, pero también son visuales porque tendrán vídeos especiales y lo que lo hace único es que todo el material” es de ella.

“Creo que, como he dicho, es poesía y visual, pero sobre temas que son importantes para todos nosotros, nuestro medioambiente, nuestras especies en peligro de extinción, el arte, las preocupaciones espirituales, e incluso hay una pieza sobre (el escritor y cineasta italiano Pier Paolo) Pasolini que tiene contenido gráfico”, señala Smith.

En “Correspondences”, el colectivo y la artista trabajaron juntos durante siete años en los que han tratado de descubrir los pasos sonoros de poetas, cineastas, revolucionarios y acontecimientos extraordinarios.

Buena parte del trabajo fue hecho por el fundador de Soundwalk Collective, Stephan Crasneanscki, quien trató de crear un espacio musical que Smith habite con su propia poesía y voz.

“Es un espectro de exploración, y lo que ocurre cuando actúo siempre es diferente porque tengo las piezas que leo, pero la energía de la gente o su concentración, la atmósfera del lugar, siempre hace que ocurran ciertos cambios, que sucedan cosas inesperadas”, explica la artista.

Es por eso que en las performances los asistentes no verán un concierto de rock, razón por la cual la artista se compromete a cantar en “algunos sitios” de la capital colombiana, en la que va a estar cinco días tratando de conocer “realmente el país”.

“SOY UNA TRABAJADORA”

Para Smith, como para todos, el encierro por la pandemia fue un momento difícil, pero logró salir adelante gracias a un libro en el que trabajó en un momento de completa soledad.

“Yo tuve que aclimatarme de nuevo a la vida pública, pero en otra forma de responder, yo soy una trabajadora, yo tengo que trabajar. Siento que es algo que no hago sólo por dinero, fama o algo como eso, es algo que hago para explorar, para buscar. Realmente necesito trabajar cada día”, manifiesta.

Y parte de ese trabajo está en la escritura, porque para ella escribir es la “articulación de la imaginación”.

“Nunca fui una gran estudiante, pero siempre tuve una muy buena imaginación y escribir me ha permitido construir una reputación no académica, a través de mis libros, a través de mi poesía. Es algo que siempre ha sido mi amigo, escribo todos los días”, resalta.

La escritura se ha vuelto tan esencial para ella que todos los días se levanta temprano y dedica dos horas y media, entre las 8.00 y las 10.30, a dejar volar la imaginación en sus letras, sin importar lo que pase.

“Es mi práctica diaria. Como dijo el gran escritor chileno Roberto Bolaño, yo pienso la escritura como mi práctica diaria igual que muchas personas rezan cada día”, concluye “la madrina del punk” con un tono de voz emocionado, como si esta fuera la primera vez que muestra su arte al mundo. 

EFE

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