Se canceló la develación del cenotafio con la escultura de sor Juana Inés de la Cruz, con el que se conmemoraría el 325 aniversario de su fallecimiento.

Con 500 invitados, el acto estaba previsto para el pasado 17 de abril en el Panteón Civil de Dolores, en la Rotonda de las Personas Ilustres, pero debido a la cuarentena por la pandemia de covid-19, la ceremonia tuvo que suspenderse.

En un comunicado emitido este fin de semana, la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), dio a conocer que será hasta el domingo 15 de noviembre, para celebrar el día del natalicio de Sor Juana, con las medidas sanitarias establecidas por la Secretaría de Salud, que en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes se llevará a cabo una guardia de honor. En el homenaje a la monja jerónima participarán la directora del Inbal, Lucina Jiménez, así como las escritoras Sara Poot-Herrera y Margo Glantz, la investigadora María José Rodilla y la rectora de la Universidad del Claustro de Sor Juana, Carmen Beatriz López-Portillo, entre otras personalidades.

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La dependencia anunció que “El Inbal trabaja junto con la Coordinación Nacional de Memoria Histórica y Cultural de México para realizar la ceremonia de traslado de los restos de Sor Juana Inés de la Cruz a la Rotonda de las Personas Ilustres”.

No obstante, eso no sucederá de esta forma, ya que lo determinado entre las instituciones culturales y gubernamentales fue solo colocar una escultura, un cenotafio en memoria a la Décima Musa (cuyo nombre fue Juana Ramírez de Asbaje), para reconocer sus contribuciones a la patria.

Carmen Beatriz López-Portillo, rectora del Claustro de Sor Juana, donde descansa la osamenta atribuida a la primera escritora novohispana, explica a M2 que “lo acordado con la Secretaría de Gobernación (Segob) fue convocar a un concurso para hacer un cenotafio, un monumento funerario, el cual se iba a develar el pasado viernes, pero por obvias razones, se canceló”.

Es una escultura de más de 3 metros de altura, con un costo de más de un millón de pesos, según la Segob, con la que se le rendirá tributo a quien defendió los derechos de las mujeres.

“Se hizo un concurso, hubo un grupo de artistas y arquitectos que participaron para realizar este cenotafio, que es una escultura muy interesante, porque se puede ver desde distintos ángulos: conforme uno se mueve la figura empieza a tener sentido”, informó la dependencia.

Este monumento con la figura de Sor Juana estará acompañado de un poema de la Fénix de México, que hace referencia a su vida.

Monumento simbólico

La idea del monumento funeriario simbólico, es decir, de una tumba vacía para rendir tributo a la autora de Inundación Castálida, la sugirió la rectora.

“La propusimos cuando nos solicitaron si podrían mover los restos mortales, y la respuesta no fue mía, porque esa decisión Sor Juana la tomó en vida. No me corresponde a mí decidirlo, en todo caso, esa fue su voluntad, ella quería quedarse ahí”.

Esta es la primera consideración. La segunda, plantea López-Portillo, es que los restos “que nosotros depositamos son atribuidos a Sor Juana, pero no tenemos la certeza absoluta de que sean de ella. Entonces, ante estas dos consideraciones, se pensó que lo mejor era hacerle un homenaje, hacerle un cenotafio en su honor, y que se le recuerde en la Rotonda de las Personas Ilustres con esta escultura, además de que una vez al año se organicen algunas actividades para recordarla.

Es decir, reitera la rectora, los restos mortales atribuidos a Sor Juana se quedarán en el claustro, en el Convento de San Jerónimo de Ciudad de México, como ella lo pidió.

La osamenta atribuida a Sor Juana Inés de la Cruz, autora de Los empeños de una casa y de El divino Narciso, descansa desde hace cinco años en un nicho diseñado ex profeso y resguardado por un cristal, en el Soto Coto del ex templo de San Jerónimo de la Universidad del Claustro de Sor Juana. 

Pendiente, traslado de Paz a San Ildefonso

El Colegio de San Ildefonso planeaba trasladar en junio los restos de Octavio Paz a un nicho en sus instalaciones. Ante la situación de contingencia, la institución informa que no es posible precisar si las cenizas del poeta, junto con las de su viuda, Marie José Tramini, llegarán en ese mes a la que fuera la preparatoria en donde estudió.

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