El dominicano Wander Franco bateó un jonrón en el inicio del séptimo episodio para poner fin al juego sin hit que estaba lanzando Lance Lynn, y los Rays de Tampa Bay terminaron anotando 10 veces en el inning para aplastar el sábado 12-3 a los Medias Blancas de Chicago.
El mexicano Randy Arozarena añadió dos vuelacercas, uno en el séptimo capítulo y otro en el noveno. Tampa Bay mejoró a una foja de 23-5, la más destacada de las mayores en lo que va de la campaña.
Franco conectó su quinto jonrón de la campaña ante el 84to lanzamiento de Lynn (1-3), con cuenta de 2-0, para desatar la locura del séptimo episodio. Arozarena y Josh Lowe lograron jonrones seguidos para coronar el ataque, mientras los fanáticos de los Medias Blancas exigían a gritos: “¡Vendan el equipo!”.
Tampa Bay sumó nueve inatrapables en el inning incluidos cinco extrabases.
Los Medias Blancas han perdido 10 duelos en fila, para igualar su peor seguidilla desde 2013. Cayeron a un registro de 0-6 ante los Rays en esta campaña.
El venezolano Yonny Chirinos (1-0) toleró una carrera en cuatro entradas y dos tercios.
Por los Rays, el cubano Yandy Díaz sin turno oficial pero con una anotada. Los dominicanos Franco de 4-2 con dos anotadas y tres impulsadas, Manuel Margot de 3-1 con una anotada y una remolcada, Francisco Mejía de 4-1 con dos anotadas y una impulsada, José Siri de 4-1 con una anotada y una remolcada. Los mexicanos Arozarena de 5-2 con dos anotadas y cuatro remolcadas, Isaac Paredes de 5-2 con una anotada y una empujada.
Por los Medias Blancas, los cubanos Luis Robert Jr. de 1-0, Óscar Colás de 3-0, Yasmani Grandal de 4-0. El dominicano Eloy Jiménez de 3-1 con una anotada y una remolcada. El venezolano Elvis Andrus de 4-1 con dos impulsadas.
Las infracciones al reloj de lanzamiento promediando 0,74%, y los Mets de Nueva York fueron los que más acumularon con 17, mientras que los Dodgers de Los Ángeles y Detroit tienen la menor cantidad con cuatro. De las 313 violaciones, 204 fueron de lanzadores, 91 de bateadores y cuatro del receptor.
Además se registraron cinco penalizaciones a un bateador por pedir tiempo, ocho a lanzadores por excederse en salirse del montículo o tiror a la primera base y una por mal uso de la camiseta.
“La información es promisoria”, aseguró el lunes Theo Epstein, exejecutivo de los Medias Rojas y Cachorros, quien fue consultor en las innovaciones. “El juego se estaba encaminando a que sólo se pudiera anotar con bases por bolas o jonrones. Ahora se incrementó el promedio de bateo y la bola está más en juego, aumentaron los intentos de robo de base, más rallies. El juego es más entretenido”.
Las restricciones a las formaciones especiales defensivas, el reloj de lanzamiento y las bases más grandes fueron los cambios que se aprobaron para mitigar impacto de la era analítica en la ofensiva.
El promedio de bateo de las Grandes Ligas es de .248 tras 425 partidos. Los bateadores zurdos pasaron de .229 hasta abril del año pasado a .242 ahora. Los derechos subieron de .234 a .250.
Las carreras incrementaron a 9,2 por partido de 8,1 el año pasado.
